El Virgili deleitó a sus aficionados con una nueva victoria sobre el Ciudad de Ceuta en su primer partido del año y coge aire para afrontar con tranquilidad el comienzo de la segunda vuelta.

El partido arrancó con un buen ritmo de juego por parte de los dos conjuntos pero el Virgili adelantó su defensa y empezó a dominar. Así en el minuto cinco Toni, que volvía al equipo, inauguraba el marcador al finalizar a portería vacía. Con la mínima ventaja los visitantes inquietaban en pocas ocasiones a Tente.

El segundo gol fue el mejor del partido, cuando el canterano Ríos hizo un regate por la banda y, casi desde el córner, introdujo el balón por la misma escuadra.

Varela y Nene incrementaban las diferencias al batir nuevamente a Javi. Y a falta de dos minutos, una contra visitante permitió a Reda anotar el primero para su equipo. De aquí al final del primer tiempo destacar dos buenas intervenciones de Tente, que salvó a los panaderos de algún gol más.

En el segundo periodo los caballas le dieron más intensidad al juego, mientras que los amarillos se colocaron muy pronto con cuatro faltas. Esto motivó que el técnico local tuviera que retrasar su defensa, y en un error de marca fue Hugo el que metió el miedo al conseguir el segundo gol (4-2).

Habría que esperar a los últimos minutos para que el marcador se moviese de nuevo. Adri pondría la tranquilidad al materializar un buen contraataque. Pero un minuto después y jugando de cinco, los ceutis redujeron distancias. La nota sorprendente la puso el meta local Juaki al conseguir un gol desde su propia área, y seguidamente Toni haría el séptimo. A falta de un segundo, un córner fue introducido en propia puerta por Juanillo.

Con el definitivo 7-4 se llegó al final de un duelo en el que los gaditanos logran tres puntos importantísimos para acercarse a la zona tranquila y para seguir haciendo de su feudo, un Pabellón del Centro otra vez con goteras, una cancha difícil para los rivales.