El Fontanal todavía no conocía la derrota en esta temporada, hasta que ayer llegó el CD Pozoblanco a desbaratar las ilusiones del Chiclana Industrial. Como bien adelantó su técnico, "había que ser muy cautos con los cordobeses porque van a salir muy fuertes". Pero no tanto, o al menos, no lo esperábamos así.

Dicho y hecho. Sancho en el nueve y Zara en el doce sentenciaron el partido antes del primer cuarto de hora. Los rojinegros salieron adormilados del vestuario y tardaron en entrar en el partido, aunque la caraja les duró apenas veinte minutos. El Industrial reaccionó intentando romper la férrea defensa del conjunto de García Sosa, pero se encontraban constantemente con un muro y, cuando conseguían traspasarlo, Carlos Sánchez las despejaba todas. Gran trabajo de los cordobeses en defensa. Pero los de Bolli no saben qué es bajar los brazos y con 78 minutos por delante tenían tiempo de sobra para marcar, empatar e incluso remontar. En el último cuarto de hora antes del descanso Cisco, Dani Guerrero y Gabi tuvieron ocasiones casi encadenadas y a punto estuvieron de materializarse, pero de nuevo el guardameta rival supo tirar de experiencia y las sacó todas. Los chicos no podían creer que no entrara nada.

Tras el descanso, el Chiclana Industrial se aplicó el cuento y salió enchufadísimo. Dani Guerrero disparó en el 46 pero de nuevo, Carlos Sánchez, su pesadilla de ayer (y la de los aficionados), atrapó el balón .Quince minutos después un trallazo de Zurga fue despejado por el arquero cordobés, rechace del que se aprovechó Guerrero, pero su disparo se estrelló contra la zaga. Pirulo remató en el 83 sin llegar a buen puerto y cuatro minutos después el tiro de Jorge se encontró con el palo. A la desesperada, Dani Guerrero de nuevo volvió a disparar pero la pelota se marchó alta. La suerte volvió a mirar para otro lado un día más.