La practicidad como filosofía, lejos del 'tiki taka'

El Cádiz se va a medir a un rival muy complicado, seguramente como ningún otro en toda la categoría. Cierto es que los amarillos han ganado este año en campos complicados y ante contrincantes serios, pero el nivel del Real Unión parece estar por encima de lo que ha tenido enfrente hasta el momento el equipo de Gracia.

Por encima de todo es un equipo muy bien organizado, con experiencia, oficio y contundente atrás. Comete muy pocos errores no provocados y apuesta por el juego directo. La practicidad la lleva hasta las últimas consecuencias y no tiene el menor rubor en dar la espalda al espectáculo, por mucho que ahora se tilde de mezquino y cicatero al que juega sus armas sin mirar la estética.

Será fundamental que el Cádiz apueste por la velocidad para rebasar un entramado defensivo que casi roza la perfección. Además, su entrenador se ha permitido el lujo de rotar a sus futbolistas en los últimos meses de la competición y llega a esta eliminatoria en un perfecto estado. El sistema que utiliza es el 4-2-3-1, con los pivotes muy cerca de la defensa y con gente muy experimentada atrás, como Berruet, Larrainzar o Gurrutxaga. En los pivotes juegan Beobide, Joseba Agirre, Salcedo o Aitor Sanz. El nivel es muy parejo y su técnico va sobre seguro.

La calidad la tiene arriba con jugadores como Abasolo, Romo o Goikoetxea, sin olvidar a otros como Juan Domínguez o Quero, aunque éste destaca sobre todo por la velocidad. Si los pivotes son los que aportan el equilibrio al equipo, la gente de arriba tiene mucho peligro porque tienen perfectamente sistematizado el sistema de las segundas jugadas y de buscar las peinadas de su delantero de referencia, que suele ser Goikoetxea, autor de 11 goles hasta el momento.

En la parte positiva, hay que destacar que al ser Abasolo muy ofensivo, suele dejar bastante desguarnecida la banda en la que juegue. Además, sus centrales sufren bastante con las faltas laterales y con todas las acciones diagonales y con los jugadores habilidosos, por lo que ahí tienen mucho que decir López Silva o Enrique. Sus defensas son expertos y expeditivos, pero se les puede ganar la espalda. Son muchas más las virtudes que los defectos, pero con un estudio profundo el Cádiz tiene mucho que decir.