Los niños rescatados de la cueva tailandesa no podrán aceptar la invitación de la FIFA para asistir a la final del Mundial de fútbol de Rusia en Moscú, según advirtieron los médicos que los tratan.

La historia de los 12 niños atrapados en la cueva ha tenido en vilo al mundo en los últimos días, hasta el punto de que el presidente del ente rector del fútbol mundial, Gianni Infantino, ofreció llevar a los jóvenes a la final del domingo si lograban salir a tiempo.

La operación de rescate concluyó ayer con éxito, cuando el grupo de salvamento sacó al entrenador y al último de los jóvenes que quedaba en la cueva, pero los doctores manifestaron, sin embargo, que es necesario que permanezcan al menos otra semana en observación en el hospital. Los galenos dijeron que los niños, miembros de un equipo de fútbol, sí podrán seguir el partido por televisión desde las habitaciones del hospital, si es que logran mantenerse despiertos, ya que el partido empieza a las diez de la noche tailandesa.