Uno de los muchos problemas que tuvo el Cádiz en la temporada pasada es que no contó en ningún momento con un portero fiable. Mucho se añoró a Armando en la segunda vuelta mientras defendía la portería del Athletic y por eso uno los pilares fundamentales del nuevo proyecto fue el fichaje de un guardameta de garantías. Llegó Casilla y hasta el momento ha dado muestras de su nivel, pero fue el domingo, en el Ruiz de Lopera, cuando destapó el tarro de las esencias.

Junto con Rubiato, autor del gol del triunfo, fue el héroe del encuentro. Quizá sea una mala noticia que el portero sea el gran destacado, pero ya se sabe que en las temporadas de los ascensos los guardametas tienen mucho que decir. Casilla no tiene especial interés por copar el protagonismo, pero comprende que después de su actuación en Sevilla, las miradas se centran en él.

"Ya antes de este partido me encontraba bien, creo que estaba haciendo una buena temporada y el equipo iba líder. Es verdad que me salió un buen partido y que para eso estoy, no tiene más importancia. Siempre intentas tener un día así de completo y tuve la suerte de que se completó con el gol de Rubiato. Yo no marqué el gol, fue él, así que no hay héroes, sino un trabajo colectivo que sirvió para que el Cádiz se llevara los tres puntos", explicaba ayer el jugador cadista.

Ni que decir tiene que la jugada clave del partido fue la detención del penalti lanzado por Zamora. El defensa, con nombre de portero, no pudo batir a Casilla, pero éste no se considera un especialista: "Esto va por rachas. Hay veces que pasan los partidos y no paras uno y otras veces tienes la suerte de que lo detienes y sirve para sacar un buen resultado. Lo que sí tengo claro es que no existen especialistas que paran penaltis porque es una cuestión de suerte y de intuición".

El catalán cree que hasta el momento ha respondido a las expectativas que levantó su cesión por parte del Espanyol. El club catalán lo está siguiendo a través de Paco Herrera, director deportivo de la entidad barcelonesa, para analizar las posibilidades de cara al futuro, pero el jugador está centrado únicamente en su etapa como cadista: "No sé exactamente qué espera la gente de mí, pero espero estar a la altura de las expectativas. Soy un jugador más del equipo y estoy centrado en terminar lo más arriba que podamos para luchar por el ascenso. Lo que pasará después no lo sabemos y prefiero hablar de cosas concretas".

No debe ser sencillo defender la portería de un equipo tan ofensivo. Ha cometido errores en algunos partidos, como en Granada, pero también es víctima en ocasiones de un sistema que mira siempre la portería del rival. "El equipo es muy ofensivo y eso se nota, pero no sirve de nada hablar sobre el sistema porque vamos los primeros y con una buena diferencia. Se está haciendo un buen trabajo y, aunque hemos encajado más goles de los que habríamos querido, creo que debemos estar contentos porque las cosas nos están saliendo muy bien. Es un placer ser el portero de este equipo", afirma Casilla.

Unos días ha sido un espectador más del gran juego cadista, en otras ocasiones ha podido ser culpable de algún gol recibido y el domingo salvó, directamente, a su equipo de una derrota casi segura. Y eso que enfrente había un rival muy fuerte, el mejor con el que se han cruzado los amarillos hasta el momento... "El Betis B ha sido el mejor rival con el que nos hemos medido. El Puertollano y el Granada también nos lo habían puesto bastante complicado, pero el Betis nos quitó el balón y eso hizo que lo pasáramos mal. Contra eso teníamos que defendernos y jugar con el cuchillo entre los dientes".

Sobre la acción en la que el árbitro del partido del domingo le perdonó la expulsión comenta que "estaba muy esquinado, pero tuve dudas y por eso me quedé tirado en el suelo. El árbitro me dijo que si no me levantaba me sacaría la roja y eso fue un alivio".

Gracias a él, en parte, el Cádiz aventaja al segundo en ocho puntos, pero asegura que no habrá relajación: "El cuerpo técnico no va a dejar que nos relajemos y, además, hay gente veterana que también va a estar pendiente de no bajar la intensidad. Todavía nos queda mucho por hacer".