Holanda ha producido a lo largo de la historia los mejores equipos de subcampeones. Ahora desea ser menos bueno, pero festejar por fin el título de un Mundial.
Holanda está empeñada en Sudáfrica en dejar de ser los “perdedores que juegan bonito” y quiere que el fútbol total que inventaron sea un fútbol completo con un trofeo.
La oranje ya no juega tan alegre en ataque ni tiene la intención de imponer su estilo ante cualquier rival.
Holanda parece haber dado con la receta. Ha vuelto a unas semifinales que no pisaba desde 1998 y quiere una final como las que perdió en 1974 y 1978, pero ahora desea salir vencedor.
El técnico Bert Van Marwijk asumió el cargo hace dos años y su idea de controlar los partidos triunfó. Pero no descarta el control de balón con los talentosos jugadores de los que dispone. Y eso se reveló como clave en el triunfo ante Brasil por 2-1 en cuartos el viernes.
“El técnico dijo que podíamos seguir jugando como lo estábamos haciendo y perderíamos por tres o cuatro y nos iríamos a casa”, contó el defensa Joris Mathijsen, que se perdió el partido por lesión, el primero desde que Van Marwijk se hizo cargo del equipo.
“O salimos y hacemos nuestro juego y hacemos que los brasileños nos persigan. Eso es lo que logramos. Lo hicimos y comenzamos a dominar”.
Holanda batió a la favorita Brasil, pero nadie descorcha el champagne, porque la meta es otra.
“Realmente no lo celebramos. No hemos logrado aún el objetivo”, dijo Mathijsen en consonancia con sus compañeros. “No vinimos aquí a hacer semifinales, venimos a ganar el título”.
Van Marwijk se marcó un objetivo cuando tomó el relevo de Marco Van Basten tras caer con Rusia en cuartos de final de la Eurocopa de 2008.
“Cuando me contrataron, les dije a los chicos: ‘Tenemos una misión. Queremos ir por el título de campeones del mundo’. La gente se burló de mí, pero si uno quiere ir por algo, hay que creer en ello y ante Brasil fue uno de esos partidos en los que se ve que todo se pone en su sitio”, dijo el técnico de 58 años.
“Mi idea era que íbamos a anotar un gol y cuando lo hicimos, jugamos cada vez mejor”, recordó cómo Holanda dio la vuelta al partido ante Brasil.
Los holandeses fueron borrados de la cancha en los primeros 30 minutos, cuando Robinho marcó para Brasil.
Pero Wesley Sneijder encontró su ritmo y Arjen Robben comenzó a provocar faltas. Y la “oranje” se rehizo y se aprovechó al final de la ansiedad “canarinha”.
Ahora Holanda encara un papel diferente. A diferencia del choque contra Brasil, los europeos son favoritos ante Uruguay en el encuentro del martes por las semifinales.
Pero Van Marwijk está convencido. Cree tener finalmente la receta. “Quiero lo máximo. La gente puede pensar que soy arrogante, pero somos el tercer equipo del ranking mundial. Es un hecho y tenemos que ir por ello”.
“Ahora queremos el título”, confirmó el delantero Robin van Persie.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios