Se han cumplido ocho jornadas ligueras desde que Agustín Correa tomara las riendas del Cajasol Puerto Real. En este periodo, el balance ha sido de tres triunfos y ocho puntos sumados. Además, antes del descanso de la competición, el conjunto de la Villa consiguió salir de los incómodos puestos de descenso, con lo que encara la vuelta a las pistas este fin de semana (jornada 13) con toda la ilusión.

Del tiempo que lleva como inquilino del banquillo puertorrealeño, Correa se queda principalmente con la victoria en casa de Teruel, "es sin duda lo mejor, porque ganar en casa del actual campeón es muy difícil para un equipo como nosotros, es inolvidable, además hicimos nuestro mejor juego".

Frente a ello, no duda en reconocer que el partido más complicado ha sido el disputado en Almería contra Unicaja porque "fueron muy superiores y nunca tuve la sensación de poder ganarles. En otros partidos sí ves que puedes hacer más, pero en este no".

El entrenador blanquiverde afirma que desde que ocupa el puesto sus principales objetivos han sido "establecer un orden dentro del campo y una disciplina de mucho trabajo". En efecto, desde que Correa se encarga de entrenar al grupo, los chicos se ejercitan unas seis horas diarias en doble sesión. Así, el míster considera que los jugadores "van aceptando esa dinámica ascendente en cuanto a trabajo y están mejorando mucho". Con respecto al balance de estos dos meses al frente del equipo, el míster se muestra bastante satisfecho, aunque tiene claro cuál ha sido hasta ahora el talón de Aquiles del equipo: "Estoy contento con el balance de victorias porque hemos logrado cinco, pero no estoy contento con cómo perdemos. Lo que nos tiene hundidos es que en la mayoría de las derrotas no sumamos y tenemos que conseguir hacerlo porque otros equipos con menos victorias están más arriba".

Y es que el técnico, que desarrolla su segunda temporada exclusivamente como entrenador (en la 2007/08 combinó esta faceta con la de jugador) tras pasar por el UCAM Murcia, opina que el nivel está muy igualado esta campaña en la Superliga: "Hay dos equipos claramente superiores, que están por encima del resto y son Unicaja y Teruel, pero entre los demás cualquiera puede ganarle a cualquiera. Creo que es la liga más igualada de todos los años".

Por ello, Correa no duda en afirmar que la permanencia "va a estar más cara que nunca, porque otras veces ha habido equipos que con cinco victorias ya estaban salvados". Asimismo, vaticina un final de liga "de infarto y muy muy igualado, en el que no se va a decidir nada hasta la última jornada aunque ojalá pudiéramos tener los deberes hechos antes". En cuanto a los equipos que pueden estar luchando en las últimas jornadas por la salvación junto a los puertorrealeños opina que serán "Multicaja Fábregas Sport, Tenerife Sur y Caravaca".

Además, el que también es preparador físico de la selección española, descarta ahora mismo por completo llegar a luchar esta temporada por objetivos más allá de la permanencia en Superliga: "Aunque va a ser difícil salvarnos, espero que lo consigamos y sino lo esperara pues me quedaría en mi casa, pero no pienso más allá porque sería una locura, no está a nuestro alcance". Por el momento, su mayor deseo es que "se siga en la dinámica ascendente tanto de victorias como de entrenamientos porque me gusta la gente implicada y si el grupo trabaja yo estoy contento, que por nosotros no quede".

Del partido del próximo sábado en casa del Tarragona tiene claro lo que espera: "Será un partido complicado pero puesto que lo que nos diferencia de otros equipos es que en las derrotas no sumamos, espero que si no podemos ganar, al menos sumemos".