La última criba que debe pasar el CD San Fernando será un hueso duro de roer, un equipo con todas las características de un conjunto vasco, con muchos jugadores de la cantera y que tiene, en su feudo, el Basarte, su bastión, aunque el Lalín, en las semifinales de los play-offs, dio la sorpresa al ganar por cero a uno. Son guerrilleros, peleones y luchan hasta la extenuación y, como muestra un botón: los de Zurimendi consiguieron su clasificación en el minuto 93 en tierras gallegas.

El hándicap más grande para los isleños es, sin duda alguna, las ganas que tiene el cuadro vasco de retornar a la Segunda B. No en vano, de las últimas 14 temporadas, 13 ha estado en la categoría de bronce, la cual abandonó la pasada campaña.

El estilo de juego del equipo vitoriano es sin muchas florituras en el centro del campo, poniendo en liza un juego directo a sus hombres de ataque, donde destaca Larraioz e Iñigo Fraile. También es firme en defensa, con una línea contundente de cuatro. Las figuras del equipo amurrioarras son dos jugadores procedentes de la cantera del Athletic; Pablo Paredes, centrocampista zurdo de unas tremendas cualidades, y Eneko Pinedo, centrocampista que vio rota su progresión en el equipo de Bilbao por su continuas lesiones. Ambos jugadores son dudas para el partido ante el cuadro isleño.

El Amurrio terminó la temporada regular en tercera posición, con un total de 67 puntos (18 victorias, 13 empates y 7 derrotas). El equipo vasco logró un total de 55 goles, siendo su máximo artillero, con 12 dianas, Íñigo Fraile, y recibió 30 tantos en la temporada regular. Y ojo a la trayectoria y al estado del equipo amurrioarra: a falta de ocho jornadas para terminar la Liga estaba octavo.

En cuanto al presupuesto del equipo alavés, este es de 430.000 euros, prácticamente menos de la mitad que tiene presupuestado el San Fernando y, los aficionados isleños que viajen hasta la localidad de Amurrio tendrán que recorrerse un total de 950 kilómetros, que es la distancia que separa La Isla de la localidad donde el equipo de San Fernando comenzará a gestar su ascenso a la Segunda División B. De momento está confirmado que la Diputación ha puesto un autobús para los aficionados, aunque el gran ambiente puede hacer que la excursión hasta tierras vascas tengan un complemento de, al menos, tres autobuses.