Garbiñe Muguruza, número tres del mundo, comenzó su defensa del título en Wimbledon con una cómoda victoria ante Naomi Broady (138) por 6-2 y 7-5, en una hora y 28 minutos.

Ante el reto de convertirse en la sexta mujer en la historia capaz de defender con éxito el título conseguido el año antes, Muguruza cumplió en su debut ante Broady, invitada por la organización.

Kvitova, dos veces campeona, dice adiós por sorpresa ante Sasnovich

En el segundo día de competición, con 27 grados y algo menos de viento que el lunes, Muguruza abrió la pista central como manda la tradición con las defensoras del título, dispuesta a solventar el encuentro por la vía rápida para ahorrar energías. Pero se mostró nerviosa y eso pudo costarle caro en el segundo set.

Aun así, Garbiñe disputó el partido como quiso, alternando buenos momentos con fallos en la red y algunas indecisiones con su remate, pero controlando la situación con su derecha y sobre todo con su saque. Todo ello le valió para acceder a la siguiente ronda.

No pudo decir lo mismo Petra Kvitova, octava favorita y que cayó contra todo pronóstico frente a Aliaksandra Sasnovich (50) por 6-4, 4-6 y 6-0.

De esta forma, la bicampeona de Wimbledon (2011 y 2014) se despidió de la peor de las maneras de la cita londinense.