Vuelta al Ramón de Carranza. El nuevo Cádiz de Víctor Espárrago se reencuentra con su afición tres semanas después de la última vez que jugó como local, un tiempo en el que han cambiado muchas cosas. El equipo ya no ocupa puesto de descenso, se ha reforzado con el uruguayo Jonathan Ramis y ha perdido a Velasco, que se ha marchado al Ceuta. Pero por encima de todo esto, el Cádiz ha cambiado su rumbo anterior a ninguna parte con una victoria en Soria y un valioso empate en Salamanca, lo que unido a las tablas contra el Huesca, hacen que no conozca la derrota desde la llegada del veterano técnico uruguayo y que, de paso, se haya tomado un respiro en la clasificación.

El Levante será la segunda prueba para los amarillos en casa desde el cambio de entrenador. Un equipo que llega con un tono amenazante pero que no pudo tumbar al Cádiz en la primera vuelta por culpa de un gol de Enrique, un jugador llamado a ir creciendo con Espárrago en el banquillo. Otra lectura que no desfavorece a los cadista es que en Carranza no se le han dado mal los equipos aspirantes a estar en la zona alta.

El doble desplazamiento a Castilla y León ha proporcionado una buena dosis de optimismo al conjunto gaditano por sentirse de nuevo ganador y capaz de dar la cara en el terreno de juego de dos equipos históricos que miran a la zona noble de la clasificación. Además de mejorar su registro de puntos, la asignatura pendiente del Cádiz es ser un conjunto solvente ante su público y, en el caso de hoy, refrendar como local lo positivo que se ha logrado en las dos salidas consecutivas.

La semana de trabajo de la plantilla cadista ha estado marcada por el susto que el jueves dio Jonathan Ramis, que se retiró lesionado tras recibir un golpe por encima de la rótula de la rodilla izquierda. El segundo y último fichaje cadista sembró el pánico porque se temía que podía causar baja para hoy, con lo que hubiera conllevado perder a una de las apuestas de Espárrago para dotar de mayor calidad a la plantilla. Al final, Ramis se recuperó de lo que quedó sólo en una contusión y el técnico le ha convocado.

Los jugadores citados por Espárrago son los porteros Kiko Casilla y Dani, los defensas Cristian, Mansilla, Álvaro Silva, Jaume Costa y Dani Fragoso, los centrocampistas Erice, Ormazábal, Abraham, Carlos Caballero, Enrique, Nano, Bogunovic y López Silva, y los delanteros Toedtli, Diego Tristán y Jonathan Ramis. Se quedan fuera los lesionados De la Cuesta, Fleurquin y Ogbeche, a los que se unen Raúl López -que está casi recuperado y podrá jugar la próxima jornada-, Cifuentes -sancionado-, Fran Cortés y Zlámal, estos dos últimos por decisión del preparador. Zlámal parece condenado a quedarse como tercer portero y, salvo sanción o lesión de Casilla o Dani, a seguir al equipo lejos del terreno de juego.

A efectos clasificatorios, el primer objetivo del Cádiz es mantenerse fuera de las posiciones de descenso e incluso ampliar la diferencia con el cuarto clasificado empezando por abajo. Los cuatro puntos obtenidos en el doble viaje a Soria y Salamanca han sacado al Cádiz de las plazas más temibles, aunque ahora queda alejarse de esa zona y acercarse a la parte templada de la clasificación. Ese logro permitiría al equipo amarillo quitarse toda la ansiedad y afrontar con calma el tramo final de competición.