Julián Rubio ofreció ayer la primera rueda de prensa de la semana y destacó que el equipo no debe caer en el error de relajarse después de haber sacado el importante punto de La Rosaleda. "El punto se ve bien, pero no quiero que se desaten euforias. Hay más cosas que hacer y algo definitivo: ratificar la permanencia para no caer en la ansiedad en el partido siguiente. Hemos felicitado a la plantilla por el buen trabajo que hicieron en Málaga, pero le exigimos que hay que ganar el domingo".

Aunque a la conclusión del choque del domingo comentó que, como hombre de fútbol, prefiere dedicarse a entrenar y no a hacer cuentas, es inevitable que se le pregunte al respecto. Cree que un triunfo debería bastar para amarrar la permanencia, pero no lo puede asegurar. "Con 50 puntos uno debe estar salvado. Sólo una vez, el Levante, bajó con esos puntos. Con 49 y el goal average debería valer en algún caso, pero con 52 aseguras del todo".

Insiste en que su equipo debe mantener la sobriedad que se le vio en defensa en Málaga, pero que tiene que mejorar en ataque para sacar adelante el choque contra el Sevilla Atlético: "Para ganar hay que hacer goles. Sólo recuerdo la de Julián de la Cuesta en un córner. A ver si mantenemos la seguridad defensiva, pero potenciamos la ofensiva. Hay que ganar y para ello hay que crear ocasiones y nosotros no lo hicimos en Málaga. En casa debemos ser expresivos y radicales en ataque".

El domingo no podrán jugar ni Raúl López ni Bezares, lesionados, pero el técnico no está preocupado. "Me he encontrado con una plantilla amplia y capaz y con recambios en casi todos los puestos, así que espero que no se note". Del rival comenta que "no hay que provocarles porque los jóvenes se revuelven".