El Betis Deportivo, jugando con el mismo estilo que el primer equipo del club verdiblanco, se impuso anoche en el Pérez Ureba por 1-3 a un Conil que mostró dos caras bastante distintas, dedicado a la contención antes del descanso frente a un rival peligroso y con un planteamiento bastante más ofensivo después del intermedio, cuando contaba con desventaja.

Los visitantes se hicieron con el balón nada más empezar la contienda y su dominio territorial hizo que llegara bastante pronto su primer tanto, a raíz de una falta lanzada por Abreu desde la banda izquierda que cabeceó Diego entrando desde atrás como una exhalación.

El primer acercamiento local, en el minuto 19, se produjo gracias a un tiro bombeado de Mario García que Tienza mandó a córner cuando el esférico se colaba por la escuadra.

Curioso fue el férreo marcaje a que fue sometido Javi Navarro por parte de Diego, el capitán bético. Una vez que aquel atravesaba la línea del centro del campo, su rival se le pegaba como una lapa.

La primera mitad siguió con la misma tónica de control sevillano, pero antes de finalizar la misma otra falta muy similar a la que había acabado con el primer gol terminó de la misma forma. La botó de nuevo Abreu y esta vez fue Raúl el que remató pero con la pierna derecha en lugar de con la testa. El propio Abreu pudo marcar el tercero antes de irse a vestuarios pero su tiro se marchó rozando un palo.

Las instrucciones del técnico amarillo en el descanso dieron fruto pues el equipo anfitrión salió con intenciones muy diferentes. Se fue a por el empate y empezaron a llegar las ocasiones hasta que Mario García, un minuto después de pedirse un penalti al ser derribado Javi Navarro, anotó con un chut desde dentro del área. Hubo oportunidades para igualar pero con los jandeños apretando fue Rober quien aprovechó una contra para sentenciar.