El Conil regresó a la senda de la derrota ocho jornadas después tras caer a manos del Córdoba B en un partido en el que los amarillos, tras un primer tiempo muy disputado, vieron como en la segunda mitad los locales se adelantaban en el marcador a media hora del final. Aunque los de Javier Zafra buscaron la igualada y dispusieron de ocasiones para ello, lo que terminó llegando en las postrimerías del choque fue la sentencia.

La primera parte transcurrió como se preveía. Dos equipos fuertes, bien colocados, con pocos espacios entre líneas y que apenas dejaban huecos. Eso producía un fútbol poco fluido, sin un dominador claro y con escasas ocasiones. La primera corrió a cargo del Córdoba B, con una falta lanzada por Miguel Ángel que atrapó Gallego.

Pasaban los minutos y los de casa no encontraban huecos en la férrea defensa del Conil. Los conileños, a la media hora, tuvieron la ocasión más clara hasta ese momento. Álex Expósito se plantó solo ante Alberto González, quien en dos ocasiones salvó el mano a mano y el primero de los gaditanos. Fue una de las mejores oportunidades visitantes en los 90 minutos.

La réplica blanquiverde llegó, de nuevo, a balón parado en un remate de Kevin que la defensa gaditana sacó entre palos, mandando a córner. Se llegaba así al descanso y la falta de fluidez e ideas era lo más destacado en ambos equipos, merced al buen trabajo defensivo de unos y otros.

En el descanso, Juan Marrero, técnico cordobesista, dio entrada a Marco Rosa, metiendo a Andrés en punta junto a Chuma para darle esa claridad de ideas al equipo que le faltó en la primera parte. Poco a poco, los locales fueron metiendo al Conil en su área hasta que, bordeando el cuarto de hora, un córner botado por Miguel Ángel fue cabeceado por Chuma para poner el 1-0 en el marcador.

El Conil debía dar un paso adelante si quería sacar algo positivo de Córdoba, hecho que aprovechó el filial para a la contra intentar sentenciar. Cuenca la tuvo para el Conil pero la mandó fuera, mientras que Marco Rosa y Fran Ávila tuvieron dos ocasiones clarísimas para sentenciar, pero no acertaron a batir a Gallego. El que sí lo hizo, en el minuto 88, fue Moyano, quien tras un pase de Sarmiento se plantó ante Gallego para, con mucha tranquilidad, batirle y poner el definitivo 2-0.