El Cádiz B se está asemejando en los últimos tiempos a un auténtico cohete. La temporada que estaba cuajando era merecedora de elogios, pero todavía había algún superexigente que le ponía el pero de no haber marcado muchos goles. Con nueve jornadas cumplimentadas sumaba nueve, con un promedio exacto de un tanto por encuentro disputado. Pues acallando esas escasas bocas no satisfechas del todo, van los pupilos de Mere y saldan el doble desplazamiento reciente a Lepe y Alcalá de Guadaíra con sendas victorias incontestables por 0-3.

Es comprensible que estos últimos resultados hayan elevado hasta las nubes la moral de los jóvenes amarillos, pero en su banquillo se sienta un Mere que sabe un rato de esto y no se muestra dispuesto a que la fenomenal racha de un equipo que continúa invicto después de 11 compromisos pueda convertirse en un arma de doble filo: "Estos dos triunfos -dice- nos sirven para reforzar lo que estamos trabajando, pero aquí no caben confianzas ni relajación. Esto es muy cambiante y ahora vienen dos encuentros en cinco días en los que tenemos que ser capaces de mantener nuestro nivel de competitividad".

El técnico portuense reconoce que "el Ciudad de Lucena es un adversario al que conocemos bien porque incluso nos enfrentamos a él la pasada campaña. Precisamente nos ganó en El Rosal pese a que aquel día protagonizamos un buen partido. Tienen jugadores con mucha experiencia y gente, como por ejemplo el ex cadista Juanse. Llegan ubicados en la zona baja y tras una serie de resultados que no han sido buenos, lo que hará que vengan con el cuchillo entre los dientes".

Mere recupera para este choque al ariete Seth Vega después de cumplir un partido de sanción. En el dique seco solo siguen Paco Olano y Braganza, pues Nacho y Alberto Durán ya se entrenan con el grupo aunque a menor ritmo.