El Real Madrid aseguró ayer su liderato de la Liga al vencer por 3-0 al modesto Leganés con un doblete de Gareth Bale en un partido gobernado por la pereza. El galés se encargó de desatascar a los suyos en la recta final de la primera parte con dos goles después de un juego bastante plano y sin apenas opciones de gol.

El encuentro, correspondiente a la undécima jornada de la Liga, sirvió para constatar que el equipo de Zinedine Zidane se alimenta principalmente de los resultados, pues su juego volvió a decepcionar a una hinchada que se aburrió. Fue una goleada rutinaria que le sirvió para alcanzar los 27 puntos.

Lo único que ocurrió en la primera parte en el Santiago Bernabéu fueron los dos primeros goles del Real Madrid, coincidiendo con sus dos únicos disparos entre los palos. Eso y un saque de esquina fue todo lo que hicieron los blancos en ataque durante 45 minutos, pero suficiente para dejar decidido el partido. A eso se le llama pegada elevada a la máxima potencia.

Mientras tanto, se veía a un Cristiano Ronaldo desesperado con todo y protestando constantamente, incluido a un Mateu Lahoz que decidió que ya no aguantaba más y lo amonestó.

Lo cierto es que el Leganés, un debutante en la categoría del fútbol español, vivió muy cómodo durante muchos minutos. Todos los equipos ya saben cómo neutralizar al Real Madrid. Basta con tapar la salida del balón de Toni Kroos para provocar el cortocircuito. Es tan sencillo que asusta, pero el equipo blanco no encuentra antídoto. El Leganés también lo hizo y lo logró con tremenda facilidad.

Sólo Cristiano Ronaldo pareció revolverse contra la nadería ofrecida por el Real Madrid. Luego llegaron los dos destellos de Bale y nada más. Pasan las jornadas y todo sigue igual: el equipo blanco gana, pero no convence. A la espera de un calendario más exigente, los números están muy por encima de las sensaciones que viene ofreciendo en este tramo el conjunto de Zidane.

El primer gol llegó a los 38 minutos, en un pase profundo de Isco para que Bale marcara con cierta fortuna. El galés rompió el fuera de juego por el centro y aunque Serantes detuvo su primer disparo, el rebote lo dejó con la portería vacía para él. Y el segundo ocurrió en la prolongación de la primera parte, con una falta puesta en el área, otro rebote y la pierna atenta del galés para completar su doblete. Así celebró Bale su nuevo contrato con el Real Madrid hasta 2022.

El líder de la Liga jugó más cómodo en la segunda parte y siguió viviendo de los remates de Bale. El paso de los minutos propició la fatiga del Leganés, que comenzó a dejar más espacios y de ello se benefició el conjunto local para soltar un poco las cadenas. Todo estaba decidido.

A los 61 minutos reapareció Luka Modric en el Real Madrid tras superar una lesión de rodilla y se llevó una de las mayores ovaciones de la mañana. Después entró James Rodríguez, recibido con menos entusiasmo por su hinchada.

El encuentro sí lo aprovechó Álvaro Morata para reivindicarse. Fue titular en ausencia del lesionado Benzema y marcó a los 76 minutos tras un gran control y una perfecta definición. El debate sobre su titularidad continuará. Igual que la discusión sobre el juego del Real Madrid. Otra cosa son sus estadísticas, casi impecables hasta ahora.

Real Madrid: Keylor Navas; Carvajal, Nacho, Varane, Marcelo; Kroos, Kovacic (Modric, 61'), Isco (James, 68'); Bale, Cristiano Ronaldo y Morata (Lucas Vázquez, 82'). Leganés: Serantes; Bustinza, Mantovani (Víctor Díaz, 82'), Insua, Rico; Unai López, Alberto Martín, Rubén Pérez, Szymanowski; Machís (Omar Ramos, 55'); y Gabriel. Goles: 1-0 (38') Bale. 2-0 (45') Bale. 3-0 (75') Morata. Árbitro: Mateu Lahoz (valenciano). Amonestó a Cristiano, Kroos, Nacho; Machís, Insua, Mantovani, Omar Ramos y Víctor Díaz. Incidencias: Encuentro correspondiente a la undécima jornada de LaLiga Santander, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 74.269 espectadores.