Nueva Zelanda derrotó en la final de la Copa del Mundo de Inglaterra 2015 a Australia por 34-17 y revalidó su título de campeón, convirtiéndose en la primera selección de la historia que levanta tres Copas Webb Ellis.

El primero y el segundo del ranking de la World Rugby se vieron las caras en una de las catedrales de este deporte, el estadio de Twickenham de Londres, en una final inédita, pues neozelandeses y australianos nunca se habían medido en esta instancia, si bien se habían visto las caras en 154 ocasiones.

Los All Blacks, campeones en 1987 y 2011, y los Wallabies, vencedores en 1991 y 1999, pugnaban ante 82.000 personas por la supremacía del rugby mundial después de firmar una actuación impoluta durante todo el torneo: seis victorias y cero derrotas.

Los vigentes campeones comenzaron el duelo con una presión muy arriba, agobiando a los australianos, que vieron como a los siete minutos Dan Carter subía al marcador los tres primeros puntos con un golpe de castigo.

Mejoraron los aussies, aferrados a Michael Hooper, David Pocock y Scott Fardy, y al cuarto de hora igualaron el choque con un golpe de castigo de Bernard Foley.

Gozaban los de Steve Hansen de la posesión y del dominio territorial, pero carecían de mordiente, y todos sus acercamientos se perdían una y otra vez en los tackles australianos. Foley, sin embargo, seguía fino a los palos y gracias a dos golpes de castigo más, al 27 y al 35, adelantó de nuevo a los suyos.

A falta de un minuto para el descanso, el empuje kiwi tuvo su recompensa y Nehe Milner-Skudder logró el primer ensayo de la final tras una excelente circulación de balón. La jugada, iniciada Aaron Smith y continuada por Carter, Conrad Smith y Richie McCaw, la finalizó Milner-Skudder en la bandera. La conversión de Carter, impecable en los primeros 40 minutos, amplió la ventaja de los All Blacks a los 13 puntos.

Los pupilos de Hansen superaron en la primera mitad a sus rivales en todos los aspectos del juego: 71% de posesión y 79 del tiempo jugado en terreno aussie.

Mantuvieron el ritmo los de negro al inicio del segundo periodo. A los dos minutos, Ma'a Nonu dejó en el suelo a Kurtley Beale para avanzar hasta la zona de marca rival y apoyar el oval.

Se le complicaron las cosas a los kiwis después de que el árbitro expulsara durante diez minutos a Ben Smith por un placaje peligroso. Con un jugador más, los Wallabies se fueron a por el ensayo y lo consiguieron en el 52, obra de David Pocock. Bernard Foley no falló la conversión y puso a los suyos a 11 puntos.

El centro Tevita Kuridrani metió en el partido a los australianos en el 63' con un nuevo ensayo, dejando a sus vecinos con un parcial de 0-14 durante los diez minutos que estuvo fuera Smith.

Ahí apareció el veterano Carter con un drop a falta de 11 minutos que amplió la ventaja kiwi hasta los siete puntos. De esta forma, los All Blacks consiguieron la llamada ventaja de seguridad, mientras Australia buscaba el ensayo que forzara la prórroga.

Pero Carter amplió la ventaja con un penalti a falta de cinco minutos para el final que certificó el triunfo de los de negro.