El Consejo de Gobierno de la Junta ha declarado zona afectada por desastre natural al municipio de Chipiona, en la provincia de Cádiz, que sufrió las consecuencias de la tormenta Bernard el pasado mes de octubre, a fin de poder habilitar desde la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural indemnizaciones para compensar a los productores del sector de la flor cortada y ayudarles en la recuperación del potencial productivo de sus explotaciones. Estas ayudas se extenderán a las poblaciones limítrofes de Rota y Sanlúcar de Barrameda, también afectadas.

Según ha explicado la Junta en una nota, esta declaración llega tras el informe realizado por los técnicos de la Consejería en el que se exponen los daños ocasionados en el sector agrícola por este fenómeno meteorológico, especialmente en aquellas explotaciones que desarrollan su actividad bajo plástico.

En concreto, según ha señalado, detalla que se han visto afectadas un total de 270 hectáreas de flor cortada y planta ornamental en la zona de la Costa Noroeste de la provincia de Cádiz, siendo Chipiona el municipio más perjudicado por este fenómeno meteorológico y tras éste, en menor medida, explotaciones de Sanlúcar de Barrameda y Rota.

Por ello las futuras indemnizaciones previsiblemente irán a ayudar, de forma mayoritaria, al sector de la flor cortada y planta ornamental, a fin de paliar los daños por pérdida productiva que se han producido en esta actividad económica y social que es, sin duda, estratégica para esta zona gaditana al generar más de 2.000 empleos directos y al ocupar el 70% de la actividad en esta comarca, ha explicado la Junta.

En este sentido, ha añadido que no obstante, también podrán solicitar ayudas otros sectores minoritarios que se hayan visto afectados por este fenómeno natural en los tres municipios gaditanos azotados por la tormenta Bernard.

La Junta ha recordado que los fenómenos meteorológicos adversos de la borrasca Bernard consistieron en vientos con rachas de más de 100 kilómetros por hora acompañados de fuertes lluvias. Su intensidad, así como las fuertes precipitaciones, fueron notoriamente superiores a las medias registradas históricamente en las zonas afectadas, con un impacto considerable en el sector agrícola de la comarca noroeste de la provincia de Cádiz.