Chiclana

Antonio Orozco pone el mundo a sus pies en Concert Music Festival

  • El cantante y compositor revoluciona a todos los pasajeros de 'Aviónica' con su energía y entrega en el escenario 

Antonio Orozco en Concert Music Festival

Antonio Orozco en Concert Music Festival / GERMÁN MESA (Chiclana De La Frontera)

El cantante y compositor, Antonio Orozco. llegó a Concert Music Festival para quedarse. Con fuerza y desgarro apareció en el Auditorio ante la gran marea humana que aclamaba por verle entrar en escena y cumplir sus sueños de Hoy. “Enamorado de todos los días y de volver a empezar”, el artista barcelonés fue recibido con un rotundo sí tras interpretar el tema del álbum Momento Feliz.

Desmelenándose en un escenario teñido de azul y con sonidos eléctricos, Antonio Orozco sacó su versión más rockera con su éxito Mírate. Con el recinto impregnado de esperanza, el artista barcelonés aventuraba que Llegará “los abrazos que hablan, momentos que marcan. La vida, la calma y yo estaré”. No se equivocaba, con las manos en el aire y dando palmas, se desató la revolución entre el público por el espectacular directo que estaba ofreciendo Antonio Orozco.

El artista está viviendo un momento dorado con su nuevo disco Aviónica, que también da nombre a su gira. En este último trabajo presenta temas frescos y muy emotivos, como, por ejemplo, A vuelos. Con este juego de palabras, es fácil detectar que la canción está dedicada a los abuelos, quienes “son el tesoro más importante y el que debemos guardar”, como así explicó en una de sus entrevistas. El tema arrancó con melodías dulces y lentas que, junto al significado de sus letras, inyectó de emoción los corazones que latían en Concert Music Festival. De hecho, alguno de sus seguidores secaba sus lágrimas, discretamente, provocado por la magia de este nuevo tema.

Antonio Orozco emprendió El Viaje por este éxito, incluido en el álbum Semilla del silencio (2001). “Sin maletas”, el artista llevaba solo su corazón para ofrecérselo a su público fiel. La multitud no podía dejar de cantar este icónico tema para el cantante, ya que es uno de sus clásicos. Sintiendo que el mundo está a sus pies y observando el gran recibimiento del público, comprendió que “las penas son de ayer y hoy todo puede pasar”; desprendiendo un halo de optimismo entre los allí presentes; antes de girar por el escenario con Giran y Van, otro de sus últimos temas.  

Una vez que calentó la noche con algunos de sus temas más queridos, un visiblemente emocionado, Antonio Orozco, le dio las buenas a noches a un público que le vitoreaba y aplaudía con gran estruendo. Con lágrimas en los ojos, confesó que “no tengo palabras para esto. Mi madre siempre decía que tuviera cuidado con lo que sueñas”. Tanto es así que “hace tiempo soñé que una noche estaría aquí en Sancti Petri, Chiclana, pero nunca me atreví a soñar que esto estaría así de público”, emocionado al comprobar el calor de su público.  

Volando sin motores, tan solo con el fluir de su música, Antonio Orozco empezó a desplegar sus últimos temas como, Si quieres hablamos, Es tu vida, Seis segundos y La Nana del camino; todos ellos extraídos del nuevo disco, Aviónica. El artista, mucho más animado, daba palmas en el aire animando al público a seguirle. Observando la increíble entrega de sus seguidores, el cantante confesaba, a través de la canción Moriré en el intento, que “me sobra el amor, tengo el momento”; proclamando el Carpe Diem como lección de vida.  

Antonio Orozco demostró ternura, dulzura y frescura con sus nuevos temas y desprendió magia en el recinto de Concert Music Festival. Completamente eufórico, el artista preguntó cómo estaba la gente de Chiclana y alrededores. Entregado a su público, interpretó Hoy será, un tema con el que el público vibró con los ritmos más eléctricos, y, al que, además, le lanzó unas baquetas para que alguien las guardara como un tesoro. La energía seguía subiendo con Qué me queda y Te esperaré, ambos unos clásicos de su carrera en la música y con los que hizo el amago de marcharse del escenario.

Ante el rugir del público, que le pedía más, regresó a las tablas visiblemente emocionado para entregarse con su guitarra a las miles de almas congregadas y ‘devolverle la vida’ a quienes lo necesitaran. Así fue como se adentró, muy emocionado, en el éxito, Devuélveme la vida.

Antonio Orozco estaba sorprendido por todo lo que estaba viviendo por primera vez en Concert Music Festival. “Esto que está pasando hoy me parece mentira, como cosas que han pasado y no parecían real”, confesó el artista. “No se trata de recordar, se trata de no olvidar, y, por eso, me gustaría que me ayudarais a no olvidar a las personas que han ayudado a que estemos hoy aquí”, alagó Antonio Orozco en referencia a todos aquellos trabajadores imprescindibles durante la pandemia.

“Durante mucho tiempo hicieron que nuestra vida fuese más bonita y fácil, porque lo que todos vosotros estáis hechos de pedacitos de cada uno de ellos”. Y con esta introducción, se adentró en otro de sus clásicos más distinguidos como Pedacitos de mí. La emoción se respiraba en el ambiente por la entrega y pasión en este tema. Iluminado por las luces de los móviles, creó un momento mágico de conexión especial con el público que cantaba al unísono con él.

Alzando una mano al cielo, Antonio Orozco se convirtió en Mi Héroe al demostrar que se podía “llenar los siete mares de valientes”. Una conmovedora historia que se esconde detrás de este éxito del artista, ya que para él “su héroe” era la madre de su hijo, que falleció por culpa de una grave enfermedad. Aclamado por el público, Antonio Orozco desplegó sentimientos y amor con este tema tan especial.

“Nervioso y acojonado” miraba el recinto iluminado por las miles de luces de los asistentes. Sentado al piano interpretó con pasión Entre sobras y sobras me faltas, su nuevo tema donde le canta al amor y al desamor, por aquello que pudo ser y no fue. Un amor que no terminó lo bien que se esperaba, que se marchó y dejó un gran vació en el corazón.

Era hora de marcharse, pero el público no le dejaba. Era la primera vez que Antonio Orozco pisaba el escenario de Concert Music Festival y su público necesitaba más. Con gran ovación, ruido y zapateo estridente en las gradas avisaban al artista de que no se fuera tan pronto. Un rebelde Antonio Orozco hacía caso omiso a las instrucciones de los técnicos que le invitaban a terminar la función. Su público le necesitaba y él no podía dejarlos con el caramelo en los labios. Entre risas preguntó: “¿Me podéis encender la luz? ¿Esto es Cádiz?” A lo que el público instantáneamente respondió estridentemente “¡Aquí hay que mamar!”. Bromeando se señaló el brazo diciendo: “Me he tatuado la frase, lo siento picha, pero no todo el mundo puede ser de Cádiz”. Entre aplausos y más risas preguntó: “¿Qué pasa que ustedes no tenéis casa y vivís en una caravana como yo? ¿Qué queréis quedaros toda la noche aquí? Me están diciendo que os tenéis que ir porque tienen que preparar las sillas para el concierto de mi amiga Niña Pastori”, continuaba explicando Orozco.

Finalmente le dieron permiso para tocar alguna canción más, vibrando Una y otra vez y enloqueciendo con Lo que tú quieras soy, fueron los dos últimos temas con los que se despidió; recibiendo un sí rotundo a su primera vez en Concert Music Festival.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios