Turismo Cuánto cuesta el alquiler vacacional en los municipios costeros de Cádiz para este verano de 2024

Aguántame el cartel

¡Qué cruz me ha caído contigo!

"Empezó con un pesebre de pastores y romanos y ahora tienen montao un peazo negocio en El Vaticano". Los Tontos de capirote, 1986.

Me ha salido el niño capillita. Con doce años recita de carrerilla oficial el dvd de Pregones, y no me refiero a la comparsa de Pedro Romero sino a uno que tiene con los 25 mejores de Semana Santa. Horrible. A su edad yo ya leía a los clásicos: el Interviú, el Lib, el Penthouse…, y el niño se sabe el A paso horquilla mejor que el libro de "Cono".

Ayer me lo llevé al Pópulo. El pobre estaba más perdido que el cuadro de los Mojosos. Mientras escuchábamos romanceros e ilegales, se quedó embobado con los escaparates de Tinoco y Eutimio, los Petronio de Cádiz, linieres de la elegancia que marcan tendencia en el mundo cofrade. Estuvimos hasta las tantas. Dice que le viene bien, que así se entrena para la recogida del Perdón.

Igualito que mi sobrina, que lleva el carnaval en la sangre. Le pusieron Maricielo, y cada vez que la llaman se viene arriba y sigue con el u, u, u, u, y canta enterita la presentación de Caleta. De mayor será cuartetera o ninfa.

En estos tiempos de libertad vigilada en los que las leyes se escriben al dictado de obispos, tiempos de ministras que se encomiendan a la virgen para solucionar el paro, de ministros que condecoran por sus méritos a nuestra señora de no sé qué, no es de extrañar que el capilleo esté incrustado en todos los ámbitos de la sociedad gaditana -carnaval incluido- como la concha de un cangrejo ermitaño en una piedra ostionera, y para oír en el Concurso letras críticas y comprometidas, salvo contadas (una o ninguna) excepciones, tengas que acudir al radiocasete.

Ahora sería impensable una chirigota como los Tontos de capirote, que por decir cuatro verdades sufrieron la intolerancia del Cádiz más rancio y casposo que ya entonces imperaba y aún hoy impregna de repugnante hedor a alcanfor la ciudad que funciona fatal. Tiene guasa que quisieran pegarle por lo que cantaban y no por cómo cantaban, sobre todo el dominico de barbas que hacía la segunda. ¡Pa excomulgarlo del tirón!

Hoy es Miércoles de Ceniza, acaba mi carnaval y empieza el suyo, aunque los dos, en realidad, duran todo el año. Mi niño es capillita, qué le vamos a hacer. Peor sería que fuera del Madrid.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios