A este veterano comparsista se le agolpan los recuerdos después de tantos años participando en la fiesta, nada menos que desde los 14 años, cuando salió en juveniles con 'Los cegadores'. A sus espaldas quedan ya 32 años de experiencias y anécdotas. "Inolvidable el año de 'Las quince piedras', 'Solera, duende y misterio', 'Patiovecino', y todos distintos". Mucho para recordar.

-Muchos años de Falla, ¿no? ¿pero hay un momento que se te haya quedado más grabado por alguna razón?

-Tengo bastantes, normal. Pero el recuerdo más grande fue cuando me dio un cólico nefrítico hora y media antes de tener que salir a cantar con la comparsa 'Con gancho'. Me tuvieron que llevar al hospital Mora y me querían dejar ingresado. Pero yo le decía al médico que no, que mi madre estaba en el Falla para verme y encima, vamos, fíjate, ¡con qué comparsa! Y canté, aunque me tuvieron que trasladar en ambulancia del Mora al Falla. Sería una de 'Las quince piedras', que se me quedó en el organismo.

-Y aunque son numerosas las agrupaciones, ¿conservas alguna experiencia como aficionado?

-Bueno, el año de la comparsa 'Los charrúa' no pude salir por motivos de trabajo, aunque después canté en la calle con ellos como uno más. Escuchándolo en el Falla se sentían cosas diferentes, una envidia sana, claro.

-También has vivido el concurso como miembro del jurado, ¿qué recuerdos tienes desde ese palco?

-De jurado la cosa es muy distinta, y ahora, después de haber pasado por allí, comprendes muchas situaciones. Si el jurado decide algo tendrá sus razones. Te lo digo porque desde el palco del jurado es el mejor sitio para ver el concurso, se escucha todo y se ve todo. Te das cuenta de todos, todos los fallos.

-¿Echaste de menos el Falla cuando saliste en 'Los contrabandistas', callejera de Antonio Martín?

-La verdad es que fue una gran experiencia pero a mí lo que me gusta es cantar en el Teatro, así que lo eché mucho de menos.