VÁMONOS que nos vamos, que cantaba el coro de la Viña cuando teníamos entre nosotros a Felipe Martín (qué arte, picha) que fue el que originó esta popular frase con la que dimos nombre a nuestro coro, 'Bátmonos que nos vamos', además de cantarlo en su estribillo en el año 1990. Qué tiempos. Pues eso, vámonos que nos vamos porque esto sigue p'alante. Me refiero al Concurso, naturalmente. Casi sin darnos cuenta ya estamos a sólo una semana para que finalice las preliminares. Quizá la fase más tediosa. Y este año más aún. Porque además de pasar por ella todas las agrupaciones participantes, con el cuento de ese articulito que se han sacado de la manga a última hora, diciendo que no hay arrastre de puntos para la siguiente fase, las agrupaciones, instintivamente, sueltan todo el lastre de sus repertorios, reservando los mejores temas para lo que queda por venir, si es que viene. Y claro, se junta el hambre con las ganas de comer. Funciones que se hacen larguísimas y las buenas coplas por llegar. Veremos a ver si esto no le da un disgusto a más de uno. Mientras tanto yo me ando preguntando en qué se habrán basado para decidir que los puntos conseguidos en la preliminar no arrastren a la siguiente fase. Trasladándolo al fútbol sería como si al final de liga los puntos del primer partido no sumaran. Que se lo digan al Cádiz si no. De todas formas, por mucho que digan las leyes, finalmente sentencian los jueces. Y no me enrollo más, que al final acabo hablando de la jueza Alaya, de los ERE y el mamoneo. Y no es para tanto, picha. Así que, como decía mi hermano Felipe, vámonos que nos vamos.