Miguel Pérez Calvente, Miguel El Mellao, como se le conoce en el Carnaval, se resiste a retirarse de la principal fiesta gaditana, si bien lleva diez años sin participar activamente en el Concurso de agrupaciones del Falla. Posee su más alta distinción, el Antifaz de Oro, que recibió hace también diez años en el mismo escenario sobre el que durante muchos años ha formado parte de chirigotas y cuartetos de renombre, que reúnen también un destacado número de premios en el certamen. Ahora mata el gusanillo con la chirigota de El Love y El Cabra, aunque no acude con ella al Concurso, "de los que soy como un padre, el sábado de Carnaval me pongo el tipo y voy con ellos a todas partes".

- ¿Pero sin embargo no lo dejan salir con ellos en el Falla y ni siquiera lo autorizan a que aparezca como figurante durante su actuación?

- Lo que ocurre es que temen que salga en alguna parodia, me digan algo desde el público y se me vaya la lengua, lo que podría quitar puntos a la chirigota. Pero todos ellos me tienen mucho cariño, llevamos juntos desde 'Una chirigota con clase', 14 años.

-¿Pese a su afecto a los chirigoteros, lo suyo ha sido siempre el cuarteto?

- Es verdad, lo mío es el cuarteto y por eso, 30 años después, me veo a veces sobre el escenario del Falla con El Peña, El Masa y El Bola en 'Audiencia Pública", donde se juzgaba la violación de una pava de patinillo, y tengo muy buenos recuerdos de 'La señorita Maribel y tres niñas de EGB' , 'El loco de la Mancha y una mancha de locos', y 'Los de Katanga', que fue el primero. Aparte queda la noche que recibí el Antifaz de Oro, en el año 2000.

- Si fuera posible, ¿qué autor le gustaría que le escribiera ahora un cuarteto para llevarlo al Falla?

-Ahora hay mucha savia nueva en esa modalidad de agrupaciones y me gustaría salir con alguno de ellos, concretamente con Juan Carlos Aragón, que creo que haría un repertorio muy crítico y luchador, como son todos los suyos, para defenderlo en el Falla.