El Lugo se presenta esta tarde en el Ramón de Carranza como una seria amenaza para el desafío cadista de disputar el play-off de ascenso, segundo objetivo marcado en la temporada una vez alcanzado el de la permanencia. Los gallegos también aspiran a subir al tren de las primeras seis plazas de la tabla y lo hacen con el argumento de ser el equipo que más elabora su juego, todo lo contrario que los amarillos. De hecho, según los datos oficiales de LaLiga 1|2|3, los de Luis César Sampedro acumulan 14.553 pases, los que más de la categoría, con una media de 455 por encuentro, mientras que los de Álvaro Cervera ocupan el último puesto de esta peculiar clasificación con sólo 10.431, 326 por partido. La propuesta de toque contra el fútbol directo se elevará a su máxima expresión en la contienda de hoy en la Tacita.

Pese a su apuesta por la posesión del balón y la consecuencia directa que ello tiene en que aparezca como una de las escuadras que más remata a puerta y la cuarta que más goles marca (42), igualada con el Zaragoza y sólo superada por Girona (51), Levante (48) y Cádiz (43), el octavo lugar que ocupa con 44 puntos le mantiene a cuatro de la zona privilegiada, cuya frontera en estos momentos establece el Getafe. Además, su caudal ofensivo, que incluye contar en su plantilla como el segundo máximo artillero de Segunda A, Joselu, con 18 dianas, no se traduce en victorias tanto como sería de suponer, apareciendo incluso como rey del empate a domicilio con 9, los mismos que el Huesca.

La explicación bien podría encontrarse en el número de goles que encaja el Lugo, que ha visto perforada su meta en 40 ocasiones, sólo menos veces que el colista Mirandés (53), el Elche (44), el Nástic de Tarragona y el Zaragoza (43) y el Córdoba (41). Capaz de dejar su marco a cero únicamente en ocho oportunidades, en otras cinco los adversarios anotaron más de dos tantos. En la capital gaditana, además, se presenta con un preocupante dato para sus intereses, ya que no vence lejos del Ángel Carro desde que el pasado 3 de diciembre lo hiciera contra el UCAM Murcia en La Condomina por 1-2. Más de cuatro meses.

Fundado en 1953 después de que desaparecieran consecutivamente los dos conjuntos que hasta entonces habían ostentado la representación del fútbol de la localidad, la Gimnástica Lucense y el CD Polvorín, el nuevo club se inició en Tercera, en donde se consolidó a pesar de un efímero paso por la Regional Preferente. En 1978 el equipo gallego logró el primer ascenso a Segunda B, aunque al año siguiente bajó y no regresó hasta 1986 a la categoría de bronce, en la que se afianzó antes de alcanzar el mayor éxito de su historia al ascender a Segunda A en 1992. El inmediato descenso precedió a un periodo insulso que dio paso a una etapa negra que incluyó varios años en Tercera. Pero en 2005 el Lugo regresó a Segunda B y en 2012 volvió a Segunda A a costa precisamente del Cádiz, asentándose, ahora sí, en el fútbol profesional.