Álvaro García Rivera. Un jugador de moda. El extremo natural de Utrera se ha convertido en la tabla de salvación del Cádiz en las tres últimas jornadas. Tres goles en ese periodo que han significado sumar siete puntos y haber evitado un descalabro grande. Álvaro García se reivindica con tantos que están sacando de más de un apuro a su entrenador y a los compañeros.

Después de no ser titular ante el San Roque de Lepe, cita en la que marcó casi al final el tanto que evitaba lo que hubiera sido una derrota durísima, la visita a Linares le abrió de nueva la puerta del once para jugar de inicio. Otra vez un gol, el de Linarejos, confirma que su apuesta ha sido un acierto. Es verdad que al jugador cedido por el Granada se le vio luego poco porque tampoco ayudaba el estilo de juego de un Cádiz al que le duraba lo mínimo el esférico en su poder. Pero ese gol, ese 0-1, ha devuelto parte de la calma perdida.

Álvaro García ha participado en 10 de las once jornadas de Liga aunque con el dato llamativo de que sólo ha sido titular en tres oportunidades. Fueron en el Marbella-Cádiz (1-1), el Melilla-Cádiz (0-1) y el Linares Deportivo-Cádiz (0-1) del pasado domingo. Todas como visitante. En las tres citas que se llevan de Copa del Rey sí las jugó desde el inicio.

La aportación del extremo sevillano, que la semana pasada cumplió 23 años, ha resultado excepcional en el mes de octubre. Para empezar desatascó el choque en Melilla, evitó el caos ante el San Roque de Lepe y el domingo fue el único que vio puerta en Linarejos. Tres partidos, tres goles y siete puntos, un registro más que suficiente para que el próximo sábado, ante el Betis B, repita en el once inicial. No obstante, con Claudio Barragán de por medio todo es posible. De hecho después de salvar la situación en el Álvarez Claro no fue titular ante el conjunto lepero.

Como no puede ser de otra manera, el extremo cadista valora lo conseguido en un desplazamiento que no era nada fácil. "De antemano sabíamos que sería un partido complicado y muy largo para disputar. Ellos aprietan bastante y fuera de casa todos los partidos van a ser de esta forma", destacando que después de todo el trabajo " hemos conseguido los tres puntos, que es lo que queríamos".

El encuentro de Linarejos obligó a un esfuerzo grande en todas las zonas del campo, ya que incluso al utrerano se le vio peleando en el juego aéreo a pesar de no ser uno de sus puntos fuertes. "Eso es ya cuestión de fortuna. Yo salto siempre todo lo que puedo, y si me la llevo bien, y si no es así, mala suerte". Álvaro valora su aportación en forma de goles. "Sobre todo me alegra por eso, por lo que suponen para todos. Eso es el fin de todo y bienvenidos sean esos goles", afirma el futbolista de moda dentro de la plantilla.

La victoria en Linares ha sido el mejor bálsamo para el equipo amarillo después de una semana convulsa en la que a los problemas deportivos por el juego y los resultados se unieron los institucionales con el tenso cara a cara entre la plantilla y el presidente, Manuel Vizcaíno. Los tres puntos calman ambos aspectos y permiten mirar al filial del Betis con bastante menos ansiedad que si el equipo hubiera empatado o perdido el pasado domingo. Los tres puntos lo curan todo, aunque sea como parar temporalmente una hemorragia de decepciones como la que caía antes de Linares.