El coronavirus ha provocado la parálisis de Wuhan, una ciudad de china de 11 millones de habitantes de la que no se puede salir y en la que tampoco es posible entrar. Estaciones y aeropuertos cerrados, aglomeraciones de personas que tratan de escapar de un virus que hasta el momento ha causado 17 muertes y centenares de infectados.

Las alarmas se encienden pocas semanas después de que el entrenador gaditano Jose González se hiciese cargo del banquillo del Wuhan Zall Fútbol Club, uno de los equipos de la ciudad que milita en la Superliga del país asiático. Con él está otro gaditano, Alfonso Cortijo, que ejerce de segundo técnico.

Los dos fueron futbolistas del Cádiz CF (se formaron en la cantera) y atesoran un amplio recorrido como técnicos, tantos juntos como por separado. De hecho, no hace muchos años dirigieron al Beijing Sinobo Guoan, también en China.

La experiencia que están viviendo ahora no tiene nada que ver con la anterior. Nadie podía imaginar lo que iba a suceder. La declaración de la cuarentena en la ciudad china se produjo cuando el Wuhan Zall FC se hallaba fuera en plena preparación de la temporada. De hecho, el equipo que entrenan Jose González y Cortijo no regresa a Wuhan dada la situación de alerta y viaja en dirección a España, donde continuará la pretemporada lejos del foco del virus.

Ni Jose ni Cortijo tenían en su agenda volver a España tan pronto, pero las circunstancias mandan y ahora trabajarán algunas semanas con su equipo antes de volver a Wuhan cuando la ciudad recupere la normalidad