Un despacho enrachado

El Cádiz sale airoso, a expensas de un posible recurso de Apelación, de la demanda interpuesta por el mediador de Kosowski, que reclamaba 69.600 euros · "No paramos de trabajar", dice García Marichal

Kamil Kosowski sujeta la camiseta del Cádiz junto a Antonio Muñoz el día de su presentación, en enero de 2008.
Kamil Kosowski sujeta la camiseta del Cádiz junto a Antonio Muñoz el día de su presentación, en enero de 2008.
Jose M. Vilches / Cádiz

12 de noviembre 2009 - 05:02

Hablar de racha en el Cádiz no es hacerlo sólo de Bartholomew Ogbeche. Los servicios jurídicos del club, encabezados por Martín José García Sánchez, han enlazado dos éxitos consecutivos y ya hay letristas de Carnaval que están tirando a la basura cuplés que tenían pensado cantar el año que viene. Se acabó el cachondeo.

Primero fue el indulto al delantero nigeriano. El Comité de Apelación de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) aceptaba el recurso del Cádiz y perdonaba al máximo goleador del equipo amarillo los cuatro partidos de sanción que le impuso el Comité de Competición dos días antes por su supuesta agresión a Xisco Campos, jugador del Castellón, en la 10ª jornada.

Y luego, según ha podido saber este periódico, el club ha salido airoso, a expensas de un posible recurso de Apelación, de la demanda interpuesta por el intermediario de Kamil Kosowski, jugador polaco que brilló muy poco hace dos temporadas en el Cádiz, equipo al que llegó en el mercado de invierno, y que a día de hoy juega la Liga de Campeones con el Apoel Nicosia. Interlex Sport S.L.U., que así se llama la empresa del mediador del ex cadista, reclamaba a la entidad que preside Antonio Muñoz la cantidad de 69.600 euros como "importe del precio pactado por sus servicios en la mediación del traspaso del jugador".

Concepción Carranza, jueza del Juzgado de Primera Instancia Número 2 de Cádiz, entiende en la sentencia que se trata de "una mediación dirigida a la contratación de un deportista profesional, mediación prohibida por la Ley que reitera tanto en el Estatuto de Trabajadores como en el Real Decreto 1006/85 la prohibición de agencias privadas de colocación". "La existencia, por tanto, de una causa ilícita o prohibida por la ley en el referido contrato provoca la nulidad radical del mismo", concluye la sentencia. La jueza absolvía así al Cádiz "de la pretensión contenida en la demanda con imposición de las costas del procedimiento a la parte actora".

Martín José García Marichal, consejero y vicesecretario del Cádiz e hijo del asesor jurídico del club, confia en que no haya dos sin tres: "Se que nos darán la razón en el caso de Kiko Femenía y que recibiremos una compensación económica, sólo nos queda eso".

García Marichal se mostraba "dolido" por la guasa que hay en torno a los recursos. "Nos molesta porque no es justo y se habla sin conocimiento de causa. No paramos de trabajar y anteponemos el Cádiz, por amor al arte, a cualquier cliente del despacho", aseguraba.

El consejero cadista repartía méritos en el recurso sobre Ogbeche que admitió el Comité de Apelación: "Antonio Moya hizo el trabajo de campo, yo coordiné y mi padre, que estuvo al tanto de todo por teléfono, dio el visto bueno".

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