La afición del Cádiz CF pasa facturas en el último partido en casa

Era el último partido en casa y por eso no era un partido cualquiera el que disputó el Cádiz CF contra el Huesca el domngo 25 de mayo. Se llegaron a jugar dos encuentros a la vez. Durante la primera mitad, mientras el balón rodaba sobre el césped, aficionados se quedaron en el exterior del estadio Nuevo Mirandilla para manifestar su descontento con la mala temporada del Cádiz CF y mostrar su rechazo a la gestión realizada por la directiva.

En el interior del estadio también hubo protestas desde la grada, sobre todo en la segunda parte. Gritos contra los máximos responsables del club y petición de dimisión dirigida al presidente, Manuel Vizcaíno. Gritos también contra los jugadores. Cánticos desagradables y pitidos que resonaron en determinados momentos, como en la entrada al campo de Rubén Sobrino o cuando Brian Ocampo entró en contacto con el balón.

La afición dio su veredicto. Su decepción viene de largo y se hizo más visible que nunca en la última cita en un hogar donde en los últimos tiempos se respira un clima muy desagradable. En Fondo Sur salió a relucir una frase demoledora contra los jugadores: "Lleváis todo el año de vacaciones".

No todo fueron protestas. Moussa Diakité fue ovacionado cuando fue sustituido. La afición lo salva de la quema.