En el minuto 71 del Cádiz B-Recreativo de Huelva (2-2), de la última jornada de la primera fase en Segunda División B, disputado el pasado domingo, Javi Navarro (24 años) volvía a enfundarse la elástica amarilla, después de una desafortunada cesión en el Albacete y de una lesión que le mantuvo varios meses fuera de combate.

El catalán de nacimiento y vejeriego de adopción sustituyó a Gudelj cuando su equipo ganaba 2-1 y en sus botas tuvo la oportunidad de sentenciar el choque. Al extremo le falta ritmo pero le sobran ganas para ser el de antes, aquel jugador eléctrico y con descaro que a principio de la campaña pasada tuvo mucho protagonismo con Álvaro Cervera en el primer equipo del Cádiz CF.

En el mercado de invierno del curso pasado fue cedido a la Ponferradina, ya que se pretendía que gozara de minutos en la misma categoría que militaba el Cádiz CF, ya que de amarillo iba a resultar más complicado. En verano regresó a las filas gaditanas antes de cerrarse una nueva salida a préstamo, en este caso a Albacete Balompié. La realidad es que las cosas no fueron bien en el Carlos Belmonte (sólo tres encuentros y una titularidad).

Una lesión fue el palo definitivo para que se resolviera antes de tiempo su cesión y el canterano regresara al club cadista. Desde que se recuperó se vio el Cádiz B como el mejor escaparate para jugar y recuperar sensaciones. Su vuelta al césped se produjo ante el Decano, y al margen de un rendimiento mayor o menor, la noticia estuvo en que Javi Navarro ha regresado con idea de ser el de antes.