Enrique ya asume su retirada como futbolista profesional

Enrique Fernando Ortiz Moruno, Enrique, mantiene la cabeza fría ante la realidad que cada vez se acerca más a su futuro profesional: la retirada. El extremeño sigue viviendo en silencio su particular calvario, el que le ha provocado una lesión de rodilla que le tiene en la enfermería desde el pasado mes de junio. El Mirandés fue el final del sueño del ascenso del Cádiz y muy posiblemente la despedida de Enrique de los terrenos de juego.

Después de nueve temporadas en el conjunto amarillo, al que llegó procedente del Cacereño, la percha espera que el centrocampista cuelgue las botas. Al menos es lo que se desprende de las declaraciones que efectuó ayer en la Cadena Ser. "Si esto sigue como hasta ahora y no vemos una solución, la retirada sería la única opción", dijo el jugador resumiendo a la perfección en una frase el estado de su dolencia. No obstante, el bravo extremo cadista no baja los brazos para ser fiel a sus principios. "Vamos a luchar hasta final de temporada, pero no es sólo la lesión ya que también está la edad (34 años) y todo eso me hace ver cada vez más cerca la retirada", agregando un contundente "a día de hoy no me veo jugando la próxima temporada".

Enrique acabó la campaña pasada con serios problemas en una rodilla que se acentuaron en la eliminatoria de ascenso contra el Mirandés. Cuando se acabó el sueño del ascenso, llegó el diagnóstico más temido: una úlcera en el cartílago. "Es una lesión que me impide correr sin dolor, el cartílago no regenera y, por lo tanto, tiene difícil solución. Hemos intentado varios tratamientos y no dan resultado", explica el de Azuaga.

En la actualidad se siente en una fase desesperante "porque ves que no hay mejoría". "Al principio no me desesperé, pero pasa el tiempo... Entreno dos días medio bien y se me inflama la rodilla", relata bastante decepcionado. Y reconoce que "intento hacer todo lo que está a mi mano para que no sea el final", agregando casi como el principio de una larga despedida que "lo que he vivido en el Cádiz no me lo quita nadie". "Son nueve temporadas en el Cádiz, un honor y un orgullo, con treinta o treinta y dos partidos cada temporada. Y en lo personal me llevo dos hijas gaditanas".

Para acabar, elogia al hombre que se ha adueñado de su banda, Ferreiro. "Ha sido de los mejores en muchos partidos, lleva cinco goles y muchas asistencias, que son unas cifras muy buenas. Ojalá esté aquí muchos años".