No hace mucho tiempo, cuando del Cádiz tan solo se hablaban maravillas, Juan Carlos Cordero salió a escena para dejar bien claro que ningún futbolista del equipo de Jose González que estuviera brillando haría las maletas en el mercado de invierno. El director deportivo del club amarillo frenaba así en seco los temores que el aficionado cadista pudiera tener por la posible marcha de futbolistas como Akinsola, Ferreiro o Ikechi Anya, que estaban marcando las diferencias en el terreno de juego.

Ayer, con los dos pies en el mes de diciembre y con el mercado de invierno a la vuelta de la esquina, no estaba de más saber qué pasa por la cabeza de Cordero ante el nuevo plazo para dar altas y bajas que finalizará el próximo 31 de enero, pero el director deportivo no está dispuesto a dar pista alguna sobre sus inminentes movimientos. Se habla de la llegada de un mediapunta y ya han salido a la palestra los nombres de Fernando Morán y Aquino. Y también se barrunta la posibilidad de que los nuevos dirigentes contraten un lateral diestro que haga sombra a David de Coz. "No hablo de jugadores y menos de las líneas que pretendemos reforzar, no es bueno hablar de ello", resumía Juan Carlos Cordero, más partidiario de hablar de salidas que de entradas. "Barrancos no debe estar sin jugar y si no lo hace en el Cádiz lo hará en otro equipo", explicó haciendo referencia a uno de los jugadores que el Granada de Quique Pina ha cedido al Cádiz de Quique Pina.

La mano derecha del murciano tocaba con sus palabras la actualidad del Cádiz y de su entorno: "Jose González sabe de primera mano lo que pensamos de él, hablamos muchas veces. Y quiero transmitir un mensaje de tranquilidad".