Quién lo iba a decir. Regresa el Cádiz CF a Primera División después de tres lustros de ausencia y sorprende a propios y extraños con un rendimiento que supera todas las expectativas hasta conseguir la salvación (de manera virtual) a falta de cuatro jornadas para el final del torneo y erigirse entre los visitantes más poderosos. La victoria en Granada fue el empujón definitivo.

El equipo de Álvaro Cervera es uno de los mejores fuera de casa. No es ninguna broma. Un lobo con piel de cordero. Es el rival más pesado del mundo para el oponente. Es lejos de Carranza donde ha forjado los anclajes de la permanencia.

Será porque no hay publico en los estadios y/o por su sistema de juego, pero la realidad es que el Cádiz CF se muestra más fuerte fuera que en casa.

Los números reflejan el poderío de los amarillos en los desplazamientos. De los 40 puntos que atesora en la clasificación, más de la mitad, 23, los atrapó bien lejos del territorio gaditano. La cuenta aún está abierta con las citas pendientes ante el Osasuna en El Sadar y el Levante en el Ciutat de Valencia.

El Cádiz CF es séptimo mejor visitante del campeonato. Ocuparía plaza europea si sólo se tuvieran en cuenta los partidos en campo contrario. Sólo están delante suya las escuadras más potentes: Barcelona (37 puntos), Real Madrid (36), Atlético de Madrid (34), Sevilla (33), Real Sociedad (26) y Villarreal (25).

Para la historia quedan las primeras victorias ligueras a domicilio contra el Real Madrid (0-1), Athletic de Bilbao (0-1), Huesca (0-2) y Getafe (0-1), a las que se sumaron los triunfos ante el Eibar (0-2) y el Granada (0-1).

Todos los éxitos como foráneo tienen un denominador común. El Cádiz CF siempre ganó cuando dejó la portería a cero, todo un aval para el modelo de juego basado en la fortaleza defensiva.

Nada menos que seis victorias. De las 17 comparecencias en otros estadios, 11 las resolvió sin derrota al cosechar además cinco empates ante el Elche, Valencia, Barcelona, Alavés y Valladolid, todos con 1-1.

De la media docena de veces que regresó de vacío, en dos ocasiones plantó cara hasta el final (1-0 ante el Betis y 2-1 en Villarreal) y sólo en cuatro envites no tuvo opciones al caer con estrépito frente al Atlético de Madrid (4-0), Celta de Vigo (4-0), Sevilla (3-0) y Real Sociedad (4-1).

Más la cuesta al Cádiz CF cuando ejerce de anfitrión. Es uno de los locales más débiles de la Liga con 17 puntos en sus 17 compromisos dirimidos en Carranza, en zona de descenso (el 18º). Sólo el Valladolid (16 puntos) y el Eibar (12) presentan cifras peores.