Los vecinos del barrio de Astilleros se reúnen esta tarde en asamblea para tratar el aumento del tráfico que desde la apertura del nuevo puente se viene experimentando en la avenida de Las Cortes; y, más en concreto, para abordar el paso de vehículos pesados por esta arteria principal de Astilleros.

La asociación de vecinos ya denunció hace unos días en este periódico, por medio de su presidente (Luis Arenal), que la avenida de Las Cortes corría el peligro de convertirse en la heredera de la Segunda Aguada, cuyos vecinos llevaban años demandando una solución al constante paso de vehículos pesados. La apertura del nuevo puente ha traído consigo que los camiones accedan al interior de la ciudad por Las Cortes y la avenida de Astilleros, algo que rechazan en la asociación.

Principalmente, el ruido que ocasiona el paso de este tipo de vehículos pesados, además de la seguridad de los bloques de vivienda de la avenida de Las Cortes, motivan el rechazo de los vecinos, cuyos representantes ya llegaron a anunciar días atrás que no permitirían que esa vía se convierta en paso de camiones y vehículos pesados.

Frente a esta opción que es la que se utiliza desde que el puente abrió al tráfico hace ahora una semana, en la asociación de Astilleros plantean una alternativa: que esa circulación pesada discurra por la Avenida de Huelva y San Severiano hasta conectar con la Avenida de Astilleros para llegar a la Plaza de Sevilla. Esta propuesta se basa en la práctica ausencia de bloques de vivienda en ese tramo, con lo que las molestias serían menores.

De hecho, la asociación de vecinos de Astilleros define que el tranvía también debe discurrir por esa avenida de Huelva cuando llegue a la capital, y no por la Avenida de Las Cortes.

En la asamblea de esta tarde (convocada a las siete en la sede que la asociación tiene en el número 1 de la calle América) se expondrá la situación a los vecinos para conocer la opinión y para abordar posibles reacciones o movilizaciones al respecto. De hecho, en la convocatoria realizada por la junta directiva se invita a participar a todos los vecinos del barrio, no solo a los asociados.

Esta asamblea será, por tanto, la primera reacción vecinal a la puesta en marcha del puente de la Constitución de 1812, aunque las críticas y quejas por los problemas derivados también se producen al otro lado de la rotonda, en la zona de la Barriada.