El puerto prevé una ralentización en el aumento de las escalas de cruceros

Con la previsión hecha pública ayer por la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz por delante de 270 atraques, en 2011 se contabilizarán menos escalas que en 2010, que acabará con 299. Pero en esta ocasión no sería ni justo ni lógico ceñirse a unas cifras que ni están cerradas aún ni resultan luego definitivas. Para llegar a esta conclusión, bastaría con echarle un vistazo a la previsión que, desde la APBC, se hacía en enero de 2010. En esa ocasión, el departamento de comunicación del organismo que preside Rafael Barra emitía una nota de prensa en la que se informaba de que las previsiones del puerto de Cádiz apuntaban a un 2010 con 256 escalas de cruceros, cuando, a falta de cuatro escalas para culminarlo, ya van 295 amarres. Pues, visto lo visto, es pura y justa estadística indicar que entre el dicho y el hecho, entre la previsión y la suma final, hay un 15% de diferencia.

Así las cosas, si la tendencia de crecimiento sigue siendo la misma, el año que entra podría finalizar con unas 310 escalas.

El aumento en ocasiones anteriores, de un año para otro, siempre rondaba en torno al 10% pero todo parece indicar que ese salto cuantitativo será menor el año que viene. Las cifras finales podrían reflejar un frenazo o una ralentización en el crecimiento del sector en lo que a número de buques se refiere.

Esta especie de congelación transitoria no se dará, sin embargo, en el número de pasajeros que visitarán Cádiz abordo de este tipo de naves. La APBC indicaba estos días que el aumento del tamaño de estos barcos sigue aumentando, de manera que si antes la media de ocupación rondaba los 1.000 turistas, este año ya se maneja la cifra de 1.400. Así las cosas, el balance dibuja un año en el que se registrará una presencia de cruceros más o menos igual que en 2010 pero los turistas que podrían llegar en barco hasta la capital podría rondar la cifra de 400.000. Y puestos a redundar en cifras, si retomamos las que se manejan en varios estudios, los ingresos que podría obtener la ciudad con la llegada de este número de cruceristas podría rondar los 25 millones de euros.

El caso es que el año de cruceros empezará el 2 de enero con uno de los grandes, el Queen Victoria, con sus 299 metros de eslora, y finalizará, tal y como relatan las previsiones que se manejan a día de hoy, ni más ni menos que el 31 de diciembre, con la escala del más grande de la nómina de cruceros que amarran en Cádiz, el Independence of the Seas, de la siempre espectacular Royal Caribbean.