"Sumándose a las muchas iniciativas surgidas por parte de organizaciones, entidades y peñas destinadas a distinguir a las mejores agrupaciones de nuestro Carnaval, Diario de Cádiz, a partir de hoy, y al término de cada función en el Teatro Falla, dará a conocer la puntuación obtenida por cada comparsa, coro, chirigota o cuarteto, tal y como lo hace el Jurado Oficial. El Jurado Diario lo integran competentes aficionados del Carnaval gaditano, destacados cada noche en el Falla". Este anuncio encabezó las primeras puntuaciones del Jurado Diario del Concurso en la edición del 30 de enero de 1985. El Diario de Cádiz no se entendería sin información de Carnaval y el Diario del Carnaval no sería el mismo sin el Jurado Diario. Su puesta en marcha fue una idea de Antonio Pérez Sauci, que siempre apostó por ofrecer a los grupos su valoración nada más terminar de cantar, algo a lo que la mayoría se oponía. Luis Frade, entonces autor de coros y a la larga presidente varios años del jurado extraoficial, lo tenía claro. "Si a mí me dicen que mi coro va el noveno no voy a cantar a la siguiente fase. Es normal. Pero entonces el Diario se inventó su propio jurado y desde el mismo día que nació creó suspicacias".

Lo cierto es que durante los primeros años no se daban a conocer los miembros del Jurado Diario. "Íbamos al teatro y apuntábamos las puntuaciones a escondidas, para que no nos vieran", comenta Juan Carlos Borrell, que fue uno de los integrantes de aquellos primeros jurados, como lo fue Manolo Ragel, corista y gran aficionado.

Con los años se tomó la costumbre de publicar sus componentes, incluso con fotografías, algo que sigue hasta nuestros días. Luis Frade, vocal en 1999 y presidente desde 2000 hasta 2006 del Jurado Diario, confiesa que antes de conocer su funcionamiento tuvo sus dudas. "Me sorprendió que el Jurado Diario fuera totalmente ajeno al periódico, que funcionara de forma independiente. Yo siempre tuve libertad incluso para elegir a los vocales. Esa fue una de las condiciones que puse para entrar. Otra fue intentar que fuera paritario, que hubiera también presencia de mujeres a la hora de juzgar a las agrupaciones".

Odiado por muchos pero seguido por todos, algunos miembros del Jurado Diario han sufrido en sus carnes la pasión carnavalesca. Frade no fue una excepción. "El primer año tuve problemas, me pintaron el coche y tuve alguna palabrita que otra a la puerta del palco. Y eso que yo, como presidente, sólo estaba ahí para asesorar a los vocales", explica Frade.

Durante todos estos años el Jurado Diario ha tenido el mismo funcionamiento que el Oficial. Es decir, son cinco vocales que puntúan y se elimina el valor más alto y el más bajo que se otorga a cada grupo.

Aunque, obviamente, es el Jurado Oficial quien da y quita los premios, la puntuación que otorga el Jurado Diario es motivo de orgullo o preocupación para los componentes de las agrupaciones, que son conscientes de que en el palco número 9 del Gran Teatro Falla también hay seis grandes entendidos de la fiesta que dan cada día su humilde opinión, una opinión que se ve reflejada en las páginas del Diario. Como lo harán este año, cuando se cumplirán 30 años de su puesta en funcionamiento. Porque, por más imitaciones que hayan surgido después, el genuino y auténtico Jurado Diario sigue siendo el de siempre. El más odiado pero el más seguido.