Ocho claves que Cádiz tiene pendientes como ciudad turística
La evidente mejora de la ciudad de Cádiz como un referente turístico nacional e internacional, de la que han tomado nota numerosos medios de comunicación internacionales, no supone que esta apuesta se pueda dar por concluida. La capital necesita mejorar en diversos aspectos que le permitirán fortalecer su oferta en un mercado muy competitivo. Supone buscar un modelo propio, aprovechando nuestras numerosas virtudes como ciudad.
A punto de concluir la actual temporada de verano, ésta son algunas cuestiones (pueden ser más, a gusto del lector), sobre las que hay que trabajar y mejorar.
1-No solo de playa vive el turismo
Centrar exclusivamente en las playas la oferta principal de la ciudad de cara a atraer al turismo de verano es un error. Esta visión deja a un lado a quienes buscan zonas agradables (como por ejemplo Cádiz) que ofrezcan una vida cultural activa también en sus vacaciones. Más allá de los escasos conciertos en el muelle y de las habituales actividades en el castillo de Santa Catalina, la ciudad sigue adoleciendo de una oferta alternativa a la playa potente y atrayente para este turismo que, además, tiende a gastar más dinero que el de sol y playa.
De cara al próximo año, Cádiz debería de ofrecer exposiciones de referencia, utilizar sus espacios históricos (si están en condiciones, claro) para la celebración de conciertos, teatros y otros eventos y, sobre todo, adaptar todos sus museos a los horarios que marcan los visitantes y, sobre todo, las altas temperaturas.
2-¿Dónde se aparca?
Sería un error para la ciudad dar marcha atrás en su apuesta por una capital más peatonal y defensora de la bicicleta. Hoy las ciudades más relevantes de Europa defienden al peatón frente al automóvil, cerrando sus centros históricos y potenciando los transportes públicos. Con Cádiz dando pasos para alcanzar también esta esencial apuesta, también es necesario buscar alternativas de aparcamiento para quienes visitan la ciudad usando este medio de transporte, sobre todo cuando aún sufrimos un importante déficit en el transporte interurbano por carretera, tren y vía marítima.
Ciudades precursoras como Pontevedra han creado islas de aparcamientos en el exterior de la ciudad peatonal. Cádiz tiene complicado seguir este ejemplo, por su carácter de isla casi totalmente urbanizada. Pero aún queda terrenos por reordenar en el exterior de la Zona Franca y en suelo portuario vecino a la avenida de Astilleros donde se pueden habilitar espacios de aparcamiento para, después, acceder a la ciudad o paseando o en un servicio de autobuses pendiente de mejora.
3-Una guía para el comercio
Playa, cultura... y comercio tradicional. La mejoría de los últimos años, a pesar de las crisis económicas y sanitarias que hemos pasado, permiten a Cádiz alardear de un comercio tradicional muy por encima del resto de las ciudades más cercanas. Queda, en todo caso, ampliar esta oferta, apostando por calles hoy secundarias donde perviven locales cerrados a precios más asequibles que en las vías más potentes. Queda, también, mejorar la información para el usuario sobre la ubicación de esta oferta.
Faltan apuestas de ocio que complementen al comercio y que permitan un horario más extenso de apertura, especialmente en los fines de semana y festivos. Y junto a todo una promoción exterior de lo que aquí se ofrece.
4-Los problemas con la limpieza urbana
El nuevo gobierno municipal llegó a San Juan de Dios anunciando un plan de choque de limpieza. El mismo aguantó unos días para después diluirse en la realidad urbana. Si el casco histórico ha mantenido un estado de limpieza más que aceptable, no puede decirse lo mismo de buena parte de extramuros. Especialmente la zona más transitada de la Avenida y de otras calles del entorno. Se ha notado la falta de baldeo y, sobre todo, la ausencia de una limpieza vespertina en estas vías, como se hacía hace ya años.
5-El cuidado del mobiliario urbano
Tanto para el vecino como para el visitante, es agradable pasear por una ciudad bien cuidada. En los últimos ocho años el mantenimiento urbano, falta de presupuesto y de personal, se ha notado en multitud de calles y plazas de Cádiz. No debería de ser una apuesta de segundo nivel para el Ayuntamiento.
6-Tres mil años sin aprovechar
Hasta que los rectores municipales, y quienes manejan la estructura del Ayuntamiento, no asuman la relevancia que debe tener la Historia de Cádiz en nuestro desarrollo económico, cultural y social, la ciudad no avanzará ni crecerá al ritmo que necesita.
Con nuestras fortificaciones cerradas o mal aprovechadas; con nuestros museos sin recursos, sin horarios y, algunos, aún incompletos; con el patrimonio religioso en buena parte ignorado... seguiremos siendo una ciudad de segunda que no sabe aprovechar sus tres mil años de rica historia.
7-Los balcones desaprovechados
Nuestra carácter de ciudad insular nos permite contar con unos balcones urbanos con mirada al mar únicos. Cada verano parte de este espacio se llena de visitantes, y gente de la tierra, maravillados por las puestas de sol. Más allá de ello, Cádiz tiene balcones desaprovechados por su mal estado de conservación o, lo peor, por su abandono, como pasa con el Campo de las Balas.
8-Turismo cinco estrellas
Todo lo expuesto aquí, solventando de forma adecuada, debería de atraer a la ciudad el turismo de cinco estrellas que tanto necesitamos, que es el que genera más ingresos para numerosos sectores económicos de la capital. Es, también, un turismo con capacidad para repetir y que tienen a "vender" entre sus amistades los destinos que han triunfado.
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