El aparcamiento subterráneo de Santa Bárbara ya tiene ejecutada la cuarta parte. El presidente de Emasa, José Blas Fernández, ha realizado una visita a las obras después de que se hayan cumplido seis meses desde el acto de la puesta de la primera piedra. Fernández resaltó que hasta el momento se está cumpliendo con los plazos previstos.

Durante este tiempo de obras, la empresa constructora Isolux-Corsan ha finalizado la construcción de las pantallas perimetrales pilotadas del estacionamiento, así como su anclaje. Al mismo tiempo han terminado con las excavaciones arqueológicas, llegando a bajar en algunas zonas del estacionamiento a la profundidad de los ocho metros que es la cota prevista para las dos plantas con la que contará el futuro parking.

Según las previsiones de la dirección de obra, el parking tenía previstas 900 plazas y disminuirán en unos 20 estacionamientos por la aparición de los contrafuertes que aguantan la primitiva muralla y cuyo considerable tamaño han provocado modificaciones en el proyecto inicial.

No obstante, el estacionamiento de Santa Bárbara seguirá siendo el mayor de los construidos hasta el momento en el Casco Histórico de la ciudad pues tendrá dos plantas y seis entradas peatonales además de dos ascensores.

El coste del aparcamiento subterráneo se eleva a los once millones de euros y la posterior urbanización de la zona superior supondrá otros 9 millones de euros.

Otro de los aspectos abordados durante la visita con los representantes de la empresa y con los técnicos, con quienes posteriormente mantuvo una reunión en el Ayuntamiento, fueron las plazas para residentes. Desde el pasado mes de enero, se puso en marcha una oficina para que los interesados puedan adquirir una de las 200 plazas que están destinadas a los residentes de la zona. El resto de los estacionamientos (700 plazas) estarán destinados a rotación. Hasta el momento se han inscrito 120 personas en las oficinas para hacerse con una de las plazas de residentes. Como curiosidad en el aparcamiento se van a utilizar 1.260 toneladas de aceros, 16.800 metros cúbicos de hormigón y 7.200 metros de pantallas de hormigón.