"En los mercados gaditanos no se dan casos de ácido bórico"

La Delegación de Consumo trabaja junto al Seprona en el seguimiento de productos

Estefanía Escoriza / Cádiz

01 de septiembre 2011 - 01:00

Tras el hallazgo y retirada de 400 kilos de pescado y marisco con ácido bórico por parte de efectivos del Seprona de la Guardia Civil de Cádiz junto a los servicios de inspección de la Consejería de Salud de la Junta, el teniente de alcaldesa de Economía y Hacienda, José Blas Fernández, asegura que desde la Delegación de Consumo se mantiene un control psicosanitario de todas las actividades del mercado local. Ambas instituciones trabajan de manera conjunta en el seguimiento de las irregularidades de productos, sobre todo "la Delegación colabora con datos sobre el control del tamaño del pescado, facilitándole la información para ayudarles en su labor", afirma Fernández.

Según el teniente de alcaldesa, tanto en el Mercado Central como en el Mercado Nuestra Señora del Rosario "no suelen darse casos de este tipo, porque los minoristas son conscientes de que cada mañana llegan los productos y son controlados por los inspectores. Así que es algo que ocurre más bien en la lonja". Además, la Delegación cuenta con un control veterinario para el pescado, que colabora con personal del SAS, quienes acuden con frecuencia a los muelles pesqueros y coordinan el seguimiento con los efectivos de la Guardia Civil.

"A la Delegación de Consumo llegan muchas denuncias, pero aun así, la gente no conoce sus derechos ni qué tipo de información puede exigir en los establecimientos en referencia a los productos que compran, como el certificado de procedencia", comenta Fernández. De las sanciones se encarga el Ayuntamiento, ya que el trámite administrativo es muy laborioso e intervienen de manera conjunta con otras instituciones. Las multas para las personas o empresas que utilizan el ácido bórico para una mejor conservación de los alimentos pueden llegar a los 15.000 euros.

En cuanto a la venta ambulante de pescado, el teniente de alcaldesa considera que es algo que requiere mucho control debido a que los productos no pasan ningún tipo de control y nunca se sabe con certeza en qué condiciones se encuentran.

Por otra parte, para la lonja de frutas y hortalizas en Cádiz no se realiza el mismo control que para el pescado, ya que los productos vegetales "ya vienen controlados desde su lugar de origen, pero para los productos dentro del mercado local, que se venden al pormenor, sí que realizamos un seguimiento", explica Fernández.

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