Si en Sevilla tardaron tres semanas en reaccionar cuando había pruebas más que fehacientes del brote de listeriosis en la empresa sevillana Magrudis, avalado por decenas de casos graves de afectados y hasta de fallecidos por esa causa, en Cádiz ha bastado un positivo en una pieza después de varios negativos y ni un sólo afectado para que la Junta decrete una alerta de seguridad alimentaria y despliegue un dispositivo de control relámpago e inusitado.

Como si de una ágil operación militar previamente planeada se tratase, apenas veinte minutos después del anuncio del consejero de Salud, decenas de inspectores de salud alimentaria visitaron bar a bar a los clientes de 'Sabores de Paterna' en Cádiz para ordenar in situ la retirada inmediata de la venta al público de las piezas de carne mechada de la marca.

Sobre chicharrones de los llamados especiales y otro tipo de chacinas fabricados por la firma paternera no hay ningún tipo de sospecha, por lo que no parece nada probable que el foco de esa única pieza contaminada esté en la fabrica que ha sido precintada y está siendo inspeccionada.

"Cuando han llegado los inspectores, que no han tardado nada, yo ya había retirado la carne mechada porque estaba pendiente de lo que estaban publicando periódicos y televisiones", comenta el encargado de un establecimiento gaditano que ofrece toda la gama de productos de 'Sabores de Paterna'. De hecho, a raíz del caso de la empresa sevillana, exhibe las piezas con sus etiquetas como marchamo de calidad.

"Nos han dicho que sólo ha dado positivo una pieza de cinco, después de que otras dos hubiesen dado negativo. Y que no hay nadie enfermo. Tal y como nos han ordenado, las hemos guardado en la cámara frigorífica precintadas en bolsas con los datos de cada lote, a la espera de que nos confirmen qué debemos hacer con ellas", añadió 

De hecho, los inspectores de la Junta no han visto inconveniente en que se sigan vendiendo y consumiendo chicharrones, butifarras, chorizos y otras especialidades de la misma marca.

"Como tardaron tanto con los de La Mechá, se ve que ahora se han puesto las pilas para demostrar que lo tienen bajo control. Y eso que no hay ningún afectado por consumir la carne mechada de 'Sabores de Paterna', que yo sepa", dice un cliente bien informado. En cualquier caso, prefiere ser prudente y seguir a la espera de más noticias, móvil en mano. 

En otra zona de la ciudad donde no se entiende ni el aperitivo ni el almuerzo sin al menos una tapa de carne mechada o chicharrones parecen estar ajenos a la alerta alimentaria, aunque los hosteleros se han preocupado de retirar las piezas sobre las que pesa la sospecha nada más conocer por la prensa digital el anuncio del consejero.