-Está manteniendo algunos encuentros, entre ellos con el delegado del Gobierno de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, que es el responsable en los temas de Justicia en la provincia. ¿Qué es lo que trataron en esta primera reunión?

-Se trató entre otros temas de las infraestructuras judiciales en la provincia, con especial seguimiento a la situación que viven los juzgados de San Fernando y La Línea. Con respecto a los primeros, se ha adjudicado la obra para que se pueda llevar a cabo el traslado antes de final de año porque esto era una urgencia por motivos de seguridad y salud laboral. En cambio, con La Línea de momento no hay ninguna solución.

-¿Y no se habló de la Ciudad de la Justicia de Cádiz?

-Se trató como un desideratum de buena voluntad pero quedó claro que no es un proyecto a corto plazo.

-¿Y ahora mismo cuáles son los principales problemas que se encuentran los abogados en materia de infraestructuras en los juzgados?

-Como abogados echamos de menos una buena sala de togas en los juzgados de lo Penal. Este es un espacio que se habilita en los juzgados para realizar la espera antes de los juicios y donde podemos seguir trabajando, estar con nuestros clientes o incluso llegar a acuerdo con los abogados de la otra parte. Hay que tener en cuenta que esperamos mucho tiempo antes de los juicios. Desde el punto de vista de la demanda el que está más sobrecargado es el Juzgado de lo Mercantil por los tiempos que corren.

-¿Hacen falta más jueces en vez de más juzgados para resolver la lentitud de la justicia?

-Esa podría ser una buena solución. A nosotros desde el punto de vista profesional nos da igual que haya más jueces o más juzgados, realmente lo que queremos es que haya más administración de justicia resolviendo los asuntos.

-¿En qué temas va a trabajar de manera inminente como decano del Colegio de Abogados?

-En la atención a los colegiados y la mejora de las prestaciones de servicios por parte del Colegio. Y eso pasa desde la biblioteca, que pretendemos que sea lo más digital posible y que tenga un mayor acceso on line, hasta la oficina virtual o conseguir que haya un diputado de guardia a disposición de los colegiados. También queremos crear una serie de comisiones abiertas con la participación de colegiados que no pertenecen a la Junta de Gobierno y la creación de un foro de debate de debates jurídicos, entre otros.

-Uno de los grandes caballos de batalla con respecto a la administración autonómica es el de la justicia gratuita y los retrasos que se produce en el pago a los abogados.

-Pues ahora precisamente estamos al día por primera vez en muchos años. El interés nuestro no es que se trate de una situación puntual sino que en el futuro se nos pague prácticamente al día. La justicia gratuita ha crecido mucho por la situación económica y por el pago de tasas. Hay que tener en cuenta que los abogados del turno de oficio realizan un magnífico trabajo profesional que debe ser retribuido dignamente y con puntualidad, porque aunque ningún despacho puede vivir del turno de oficio sus ingresos puntuales son muy necesarios, sobre todo como complemento para pagar los gastos de despacho.

-Los casos de justicia gratuita han subido mucho y los requisitos para obtenerla tampoco son demasiado complicados. ¿Cree que se pueden endurecer los requisitos para acceder a ella?

-Eso es muy delicado y ahora quizás no es el momento. Más adelante puede que sí. Para nosotros los abogados es un honor, un motivo de satisfacción y forma parte de nuestra función social. Ahora bien, eso tampoco puede volverse en contra de los que prestamos el servicio porque la justicia es gratuita para el que la recibe pero no para el que la presta.

-¿Es una leyenda esa imagen de que el servicio que se presta en la justicia gratuita es peor que en la de libre designación?

-Los abogados que prestan el servicio son los mismos que hacen el de libre designación. Están perfectamente cualificados y dedican el mismo interés a un tipo de asunto y a otro. Hoy para ejercer el turno de oficio tiene que haber superado dos años de la Escuela de Práctica Jurídica con una formación integral y muy práctica, además de tener un mínimo de dos años colegiado.

-La crisis también afecta a los abogados y hay muchos despachos que han bajado su actividad y que, incluso, han cerrado

-Ahora mismo la mayoría de los abogados se unen con otros para compartir despachos y gastos. Eso permite reducir los gastos y optimizar los ingresos. Además también es algo positivo para la especialización aunque he de decir yo tampoco soy un defensor a ultranza la misma. Considero que el Derecho tiene una visión general y en Cádiz es muy difícil que un despacho se pueda mantener solo con temas de una única materia, aunque tengo que admitir que es el futuro.