Informe sobre el transporte en la ciudad. bicicleta

Un hombre a una bici pegado

  • Pablo Diánez, organizador del grupo 'Carril-bici, de verdad bien hecho, en Cádiz', destaca inconvenientes de la infraestructura viaria para bicicletas

Se mueve en bici por la ciudad. Constantemente. Se puede decir que Pablo Diánez es un hombre a una bicicleta pegado, y parte de culpa la tiene el ecologista Enrique Carbonell, a quien Pablo veía moverse por la ciudad sobre su bici. En cierta forma, esa repetida imagen le motivó a darle a los pedales. Carbonell, que actualmente reside en Argentina, creó el grupo de Facebook 'Carril-bici, de verdad bien hecho, en Cádiz', al que se unió Diánez, y como miembro activo le propusieron ser uno de los organizadores del grupo. Esta plataforma, que cuenta con más de 1.130 miembros, fomenta el uso de la bicicleta como medio de transporte, así como el respeto y la promoción de la bici como vehículo por la calzada o, al menos, por un carril-bici bien proyectado, segregado de la acera y no entrando en conflicto con el peatón.

El joven, de 34 años y que lleva una década desplazándose sobre las dos ruedas, se alegra de que cada vez más personas hagan uso de la bicicleta para moverse por la ciudad, aunque lamenta los diversos inconvenientes que tienen que sortear. "El primer gran problema es la mala educación de todos, y cuando digo todos me refiero a ciclistas, peatones y conductores. No sabemos compartir el poco espacio que tenemos en la ciudad y no sabemos respetarnos unos a los otros". Como ejemplo, señala que los peatones caminan constantemente por el carril bici de la avenida Juan Carlos I, "cuando por tramos tienen gran espacio para hacerlo por otro lado de la misma acera, y si dices algo se enfadan". Asimismo apunta que hay ciclistas que marchan muy rápido por el Paseo Marítimo y, encima, con los auriculares puestos, e igualmente critica a esos conductores de coches que se consideran "los reyes de la carretera y te dicen de todo por ir por ella en la bici".

Al organizador de 'Carril-bici, de verdad bien hecho, en Cádiz' le cuesta hablar de carril-bici en la ciudad. Prefiere llamarlo "pintadas". "Te entran ganas de denunciar a los graffiteros del Ayuntamiento que pintaron las líneas en el Campo del Sur", bromea. Y es que este ciclista considera que ese carril-bici está lleno de "parches". "Es el más chapucero de la ciudad y el más problemático, pues genera una continua guerra entre peatones y ciclistas", ya que en algún que otro tramo los peatones no tienen más remedio que introducirse en el camino señalizado para las bicicletas, y durante gran parte del recorrido no es posible establecer un metro de distancia entre viandantes y ciclistas.

Diánez también dirige la mirada hacia el carril-bici de la avenida Juan Carlos I: "Es otro que también tiene delito... Considero que está mal planteado, pues debería estar al borde de la acera y los árboles a continuación, para así separar el carril de la parte destinada al peatón".

Otro problema que apunta es la falta de aparcabicicletas en los módulos de la playa. Suele frecuentar la playa Santa María del Mar, y hace años Pablo era el único que dejaba la bici encadenada a un poste de un cartel anunciador de obras, pero actualmente son muchas las personas que acuden a la playa en bici y se queja de que no hay espacio para dejarlas. "A ver si este verano instalan aparcabicicletas, a poder ser del tipo que se ha colocado junto a la puerta de la sede de la Delegación de Hacienda, porque el modelo que han puesto en el muelle dobla las ruedas".

El gaditano aboga por fomentar el uso de la bicicleta entre los escolares. "Apuesto por que los niños vayan al cole en bicicleta y que sea educados en ese concepto de movilidad sostenible, e incluso las escuelas deberían facilitar este tipo de transporte", comparte.

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