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Cádiz

La frialdad del PSOE deja al PP un poco más lejos de la Alcaldía

  • "Seguimos estando por el cambio", dijo Fran González tras su reunión con Teófila. La alcaldesa advierte: "Cada uno será responsable de lo que pase en el futuro".

Fran González avanza con paso decidido por San Juan de Dios. Dentro del Consistorio le espera la que ha sido regidora de la ciudad durante las dos últimas décadas. Antes de alcanzar la puerta custodiada por un policía local, una pareja de ciudadanos, atraída por el revuelo mediático, se acerca y la mujer pregunta: ¿Esto es una boda? Podría ser, pero de momento el único beso que se han dado los implicados es el que acompaña al saludo protocolario. Porque tras el encuentro no hubo un mísero apretón de manos que llevarse a la boca, una comparecencia conjunta, ningún signo de que PP y PSOE están un metro más cerca de lo que lo han estado en estos últimos 20 años, y sí más bien un ambiente de cambio de ciclo. "Estamos por el cambio. Lo hemos estado desde el primer momento", suelta Fran González como despedida ante los medios como única muestra de unas intenciones que, pese a esa declaración, siguen sin estar del todo claras 72 horas antes del debate de investidura. Y Teófila advierte minutos después, pertinaz en su discurso. "La mayoría de los gaditanos nos han votado para llevar adelante esta ciudad. La equivocación de los políticos trae graves consecuencias para los ciudadanos". Pero la verdad es que Teófila empezó ayer a despedirse de manera no oficial de su entorno.

Lo cierto es que el contacto entre la formación que ha gobernado la ciudad en estas últimas legislaturas con mano férrea y la oposición que la ha sufrido en sus carnes apenas duró una hora y no despejó las incógnitas creadas por los resultados electorales. Fran González, el alcaldable socialista, llegó flanqueado por cargos de su ejecutiva local, Pilar González, secretaria de organización; y Manuel González Piñero, presidente. En el otro lado de la mesa, la alcaldesa en funciones junto a los concejales Ignacio Romaní y Bruno García. Rostros serios que apenas dejan escapar una sonrisa mientras los fotógrafos inmortalizan el momento en el Salón Isabelino de la Casa Consistorial.

Y tras el cambio de impresiones, llega el momento de hablar, de contar cómo está un posible pacto que se antoja lejano.

El primero en tomar la palabra fue Fran González, quien, tras explicar que había expuesto a la alcaldesa en funciones algunas de las iniciativas que lleva en su programa y conocer los seis pilares básicos sobre los que el PP quiere cimentar su sexta legislatura, reconoce que para producirse un apoyo socialista sería necesario "que la política popular dé un giro radical de 180º", destacando la necesidad de contar "con una mayor transparencia en su gestión sustentada en la nueva situación electoral y llegar a acuerdos entre las fuerzas políticas, porque la ciudad no puede seguir anclada", a la vez que exigió elaborar un paquete de medidas "para mejorar la situación del empleo y la vivienda".

Fran González, que hoy se verá con Por Cádiz Sí se Puede y su candidato a la Alcaldía, José María González Kichi, insistió en que en dicha cita quieren que les expliquen algunos puntos claves en su programa. "Nosotros no estamos en contra de la municipalización de servicios, pero dudamos de que se pueda producir", dijo Fran, que señaló que en el mitín con Ganar Cádiz "no se nos dieron las respuestas que pedimos".

González aseguró ser consciente de que cualquier paso que den será "fundamental e importantísimo" de cara a la constitución del próximo gobierno de la ciudad, por lo que garantizó que la decisión que adopte el PSOE el sábado estará sustentada "sólo y exclusivamente en mirar por el futuro de la ciudad y de los gaditanos".

El líder socialista anunció también que hoy trasladará a Podemos las iniciativas que entiende que "tienen que ser vinculantes para cualquier futuro gobierno en la ciudad", si bien volvió a repetir que en cualquier caso el PSOE no estará en ningún gobierno municipal, y sigue barajando votarse a sí mismo, lo que facilitaría la investidura de Teófila Martínez.

Por último, Fran González aseguró que tras encontrarse con PP y PCSSP, en la tarde de hoy celebrará una reunión de la ejecutiva local del PSOE para tomar una decisión en lo que atañe a su posicionamiento en el Pleno del sábado, que insistió en que se adoptará "de manera coordinada con el resto de órganos del partido".

En cuanto a la alcaldesa en funciones, hay algo en su rostro que denota una pérdida de esperanza. Posiblemente sería la primera sorprendida si el PSOE permitiera su investidura el sábado, más incluso que algunos de sus pretorianos, que aún quieren pensar en que a los socialistas les costará votar por el alcaldable de Podemos. Quizá por ello ya contempla un escenario en la oposición. "No vamos a defraudar a los gaditanos allá donde nos coloquen los ediles electos tras el Pleno de investidura. Ya sea desde el gobierno o desde la oposición, seremos leales con los gaditanos y lucharemos por el interés general de la ciudad. Seremos muy exigentes en todos los casos", aseguró Teófila.

Martínez explicó que en estos momentos están "abiertos a cualquier contacto" con el PSOE y el resto de formaciones, y recordó que se han ofrecido a hablar "con todo el mundo". De hecho, ya lo han hecho con todos los partidos menos con Por Cádiz Sí se Puede, que "no ha querido".

Según dijo, "por el bien de la ciudad, los canales de comunicación tienen que estar abiertos siempre desde el punto de vista leal, político y democrático, máxime teniendo en cuenta que nos quedan cuatro años de trabajo intenso y que los gaditanos han pedido en las urnas que haya un entendimiento entre los partidos".

La alcaldesa en funciones no quiso desvelar sus impresiones tras la reunión con el PSOE sobre el posible posicionamiento de los socialistas en el Pleno del sábado, cuando sostiene que "cada uno será responsable de lo que pase en los próximos cuatro años", para advertir a continuación que "luego no valen los arrepentimientos ni decir: Me equivoqué".

El día tuvo aires de despedida para la alcaldesa, y entre sus allegados políticos la impresión y las palabras eran de despedida de una alcaldía que ha sido suya durante 20 años.

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