La familiar vuelta del 'Elcano' a Cádiz, ya sin la princesa Leonor: "Ha sido un crucero maravilloso, lo hemos vivido con naturalidad"

Cuando la silueta del Juan Sebastián del Elcano ha aparecido poco antes de las nueve de la mañana, en el muelle de Cádiz se hacía más patente la alegría y los nervios de madres, padres, abuelos, hijos, tíos, sobrinos, amigos, y también mascotas; que esperaban a la dotación del buque escuela de la Armada. La tripulación volvía a casa tras seis meses de viaje y las familias contaban los minutos para poder abrazar a los suyos entre pancartas con mensajes cariñosos de todo tipo, globos y ramos de flores. "Llegamos con muchas ganas de disfrutar de las familias", contaba uno de ellos poco después de desembarcar tras un "crucero maravilloso".

Y es que el recibimiento se ha desarrollado en un ambiente muy familiar, ya sin el protocolo y la expectación que levantó su despedida en el mismo lugar hace seis meses, cuando los Reyes acudieron para despedir a la Princesa Leonor, que se embarcaba como guardiamarina en el 97 crucero de instrucción. La princesa de Asturias, junto a los 75 guardiamarinas de la promoción, ya desembarcaron hace unos días en Marín y hasta Cádiz ha llegado la dotación del buque escuela -junto a unos 90 civiles que han ocupado los espacios dejados por los alumnos- que, a preguntas de los medios, comentaban que "no ha sido un crucero diferente" sino que "ha ido todo normal".

La princesa ha "realizado las mismas tareas que el resto de los guardiamarinas" y con una tripulación, la mayoría de la provincia de Cádiz, que en buena parte repetía respecto al crucero anterior, apuntaban. "No noté diferencias, ha sido muy parecido al que hice el año pasado", manifestaban. "En el barco ha ido todo muy bien pero pensar ahora en una cama de verdad y un sofá... de esas cosas también hay ganas", bromeaba otro tripulante entre risas con los suyos.

Así, Jorge Piñeiro se queda con "haber podido hacer la entrada en Nueva York, algo que me hacía mucha ilusión". "Es una buena experiencia, ves mucho mundo; lo peor es estar tanto tiempo lejos de la familia", comentaba tras terminar su segundo viaje en el Elcano.

Para Laura Yesa, de Torrecera (Jerez), ha sido nada menos que su cuarto viaje , "y último por ahora". "Ha sido un crucero maravilloso, con los guardiamarinas muy bien como todos los demás, y siempre está muy chulo cumplir hitos con el barco como el Cabo de Hornos o cruzar el Canal de Panamá. Todo ha estado muy bien y hay muchas ganas de estar con la familia", comentaba la gaditana, que señalaba que tiene muchos compañeros de la provincia, "de Cádiz, de San Fernando, de Jerez, de Rota,...".

"Ha sido un viaje marinero precioso"

"Todos los cruceros son especiales para los que lo hacemos y éste también. Lo hemos vivido con naturalidad y normalidad", incidía su comandante, el capitán de navío Luis Carreras-Presas, ante las cuestiones de los periodistas sobre la presencia de la Princesa a bordo. "Volvemos a casa con la satisfacción del deber cumplido, con los objetivos marineros y académicos cumplidos y con el barco en plena forma, bien mantenido y bonito como podéis ver", decía el mando, que termina su etapa al frente del bergantín goleta.

"La verdad es que ha sido un viaje marinero precioso donde ha ido todo muy bien", destacando una vuelta a Sudamérica especial al surcar mares y ver lugares "por los que pasaron y descubrieron marinos españoles a lo largo de los siglos". Terminando en un puerto querido como Cádiz, "que siempre nos recibe con alegría", toca ahora "disfrutar de nuestras familias, intentar que la dotación descanse y sin solución de continuidad ponernos a pensar en el crucero 98".

En el muelle el alcalde de Cádiz, Bruno García; la delegada del Gobierno, Blanca Flores, la presidenta de la Autoridad Portuaria, Teófila Martínez y otras autoridades civiles acompañaronal almirante de la Flota, Eugenio Díaz del Río Jáudenes, en este recibimiento. Tras descender la imagen de La Galeona, para regresar a su tempo de Santo Domingo, los abrazos y los besos han sido los protagonistas. El buque partió a las doce para su base de La Carraca, en San Fernando, con parte de familiares a bordo para seguir disfrutando de esta vuelta a casa.