Agentes de la Policía Nacional han detenido en Cádiz a un hombre de 36 años de edad como presunto autor de los delitos de estafa y falsedad documental. El detenido aprovechaba sus contactos como agente inmobiliario, así como sus dotes de persuasión, para captar a personas interesadas, principalmente, en la adquisición de un inmueble, con quienes formalizaba sendos contratos de compraventa, una vez cobrado 3.000 euros en concepto de adelanto.

La investigación se inició a raíz de las denuncias interpuestas por tres víctimas que aportaron los contratos de compraventa de inmuebles donde habrían evidenciado la existencia de cargas y gravámenes, precios inflados y titularidades ficticias, entre otros aspectos. El denunciado regentaba una agencia inmobiliaria situada en el casco histórico de la ciudad, además de actuar como intermediario de otras agencias.

Cuando las víctimas se percataban del engaño y para evitar que los hechos fueron puestos en conocimiento de la Policía Nacional, eran embaucadas con falsas promesas de pago para devolverle su dinero de forma fraccionada, o les conminaba excusándose en que lo que hacía era lícito y que tomaría represalias legales si perjudicaban a su imagen.

Cuando por causas ajenas al comprador, la compraventa no llegaba a materializarse, estos le requerían la devolución del importe abonado en concepto de reserva, lo que siempre era contestado por parte del encausado con evasivas, excusas o directamente no atendía las llamadas.

En otros casos, el importe del precio acordado era superior al precio real del inmueble, lo que no era revelado hasta celebrarse el acto en la notaría, lo que había sido ocultado deliberadamente para, una vez celebrado el acto de firma de las escrituras, recibir el importe restante en metálico en nombre del vendedor, y apropiárselo exclusivamente para su beneficio, todo ello sin contar con la comisión pertinente por la gestión de la venta.

Así pues, tras recabar las pruebas incriminatorias se llevó a cabo la detención del presunto responsable de los delitos de estafa y falsedad documental. Una vez finalizado el atestado policial, el detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia en la ciudad de Cádiz. Paralelamente ha sido solicitada a la Autoridad Judicial el bloqueo de cuentas bancarias del detenido, como medida cautelar a adoptar para garantizar la restitución del dinero estafado a las víctimas presentes y futuras.

La investigación continúa abierta, ya que por actuaciones practicadas se ha tenido conocimiento de la existencia de más personas afectadas, de cuyo resultado se dará debidamente cuenta al Juzgado de Instrucción de Cádiz correspondiente, mediante la confección de las pertinentes diligencias ampliatorias.