No es casualidad. El hecho de que primeras firmas hoteleras, comerciales y de restauración elijan cada vez con más asiduidad abrir negocios en la ciudad es síntoma claro de que Cádiz es un destino de moda. Una “apuesta segura”. Así lo trasladan también los nuevos propietarios de Tiempo Libre, la empresa Q Hotels, con apenas media docena de establecimientos que se ha lanzado a una operación que de entrada le ha supuesto ya 11,8 millones de euros (los que ha pagado a la Junta para hacerse con el edificio de Tiempo Libre).

“Cádiz es una apuesta segura, no vamos a tirar la casa por la ventana ni se trata de una utopía o una ilusión. Es un destino fuerte y potente”, trasladan desde Q Hotels, que no obstante apuestan por la necesidad de reactivar la oferta hotelera gaditana, renovarla, “adaptarla a los nuevos tiempos comerciales y las exigencias de los clientes de hoy”. Por eso, valoran actuaciones recientes como la que hizo Turespaña derribando el antiguo Atlántico y levantando el actual Parador; o la inversión que hizo hace unos años Barceló levantando el nuevo hotel en la esquina de la Avenida de Portugal.

“La plaza está, pero hay que renovarla un poco. Y eso es una misión de todos, no sólo de las administraciones. Todos tenemos que empujar un poco y potenciar aún más el destino”, analizan los nuevos propietarios de Tiempo Libre, que quieren aportar su grano de arena con el proyecto que ya han empezado a reescribir en lápiz sobre papel blanco y que plantea un hotel abierto a la ciudadanía con todo tipo de servicios y espacios.

A nivel hotelero, la llegada de Q Hotels es el último ejemplo del interés de una ciudad que, en el lado contrario, cada vez encuentra más problemas en su parque de viviendas por falta de ofertas. Precisamente, la noticia de Tiempo Libre coincidía en el tiempo, prácticamente, con la compra que Atom Hoteles hacía del Senator Cádiz de la calle Rubio y Díaz, aunque en este caso la empresa hotelera seguirá gestionando el hotel.

También conviene recordar la apuesta que progresivamente está realizando Hotusa en la ciudad, una firma solvente a nivel nacional que ya está trabajando en la apertura de los apartamentos turísticos en el Palacio de Veedor y en la histórica finca de la calle Manuel Rancés, así como en el hotel del palacete de la esquina de Sagasta y Tinte, además del proyecto de la Casa del Almirante que quiere abrir definitivamente como hotel en 2021.

De igual forma, no hay que olvidar el proyecto hotelero de Puerto América, o a menor escala el que se va a desarrollar en plena calle Columela.

El destino Cádiz es hoy en día una apuesta segura. La clave es si la ciudad sabrá aprovecharlo.