A vivienda se encuentra situada en una planta de una finca de la Cuesta de las Calesas. Sus moradores son Nacho Padrino y Rafael Revuelta, quienes tras vivir en Madrid, trasladaron su residencia a Cádiz, donde pasaban temporadas. Tras callejear y visitar diferentes barrios y casas, eligieron esta edificación por la altura de sus techos y su ubicación.

Su gusto estético con la visión del reciclaje y su influencia mejicana, donde también han pasado temporadas, han sido los ejes que han movido esta original decoración. Ello destaca por los espacios limpios y juego de colores que se reflejan en muchos de sus muebles reciclados.

La casa tiene una gran entrada con un distribuidor, dos dormitorios, salón, cocina y cuarto de baño.La entrada da la bienvenida un mueble castellano que ha sido reciclado pintándolo de color lacre. En la parte superior y por su influencia mejicana se encuentra una pequeña capilla con una cruz en su interior, que representa diferentes imágenes de la Virgen de Guadalupe. A todo ello le rodea una colección de corazones mejicanos de hojalata.

El salón es la estancia principal de la casa, donde su luminosidad resalta la decoración. El color elegido para sus muebles es un azul pato y una de sus esquinas se ha destinado para colocar una pequeña mesa de comedor con tapa de madera y las patas pintadas a juego con el conjunto de sillas que la rodea, todo reciclado. En sus asientos se han colocado unos cojines de la firma Zara Home, de color crema con rayas.

Uno de los dormitorios

Un gran sofá diseño de los 70, tapizado en amarillos con una patas de acero inoxidable, da la bienvenida en este espacio. Y en uno de los laterales de dicho sofá, se ha colocado una vitrina reciclada en también azul pato, que alberga una colección de porcelanas antiguas en su interior. Otro de los muebles que se ubica en la estancia descrita es un sillón vintage en cuero y madera junto a un escritorio con unos originales tiradores de metal que representan a unos elefantes. Las lámparas que cuelgan del techo son de mallas doradas, adquiridas en la tienda Fronda en Jerez de la Frontera. Una original lámpara de pie de los años 60 con una tulipa de Ikea, se sitúa en otro de sus rincones. En una de sus paredes se han colocado como repisas dos tablas de madera natural, sobre la cual se apoya una colección antigua de quinqués y porcelanas inglesas. Y en otra de sus paredes se ha ubicado un antiguo espejo de aparador reciclado, que da amplitud a la visión del espacio.

En el dormitorio la temática es el cactus, que se refleja en la tapicería del cabecero de cama, en el diseño de algunas lámparas o en elementos decorativos de cerámica. Junto al piecero de cama, aprovechando el espacio, se ha colocado un puff de color verde militar. En la parte superior del cabecero se han colocado dos ilustraciones mejicanas de gran colorido. A este conjunto de muebles le acompaña una cómoda Art Decó y un escritorio de persiana de los años 20 del siglo pasado. Como elemento decorativo original destacamos una capillita de madera, que representa en su interior una Virgen realizada por ‘Muerta Jacinta’, la cual se apoya sobre una peana de madera.

Otra imagen de la vivienda.

El hall que conduce a distintas estancias luce un taquillón de la India, en el que sostiene una colección de objetos y espejos labrados de India. Entre sus cuadros se encuentra una lámina de Ricardo Cavolo junto a dos acuarelas con escenas de la vida diaria de La Caleta, de la artista afincada en Vejer Neila. Todo este conjunto se encuentra pintado en color orégano reciclado.

Para el dormitorio de invitado se ha dispuesto de una cama con un cabecero tallado en madera natural. En su parte superior se ha decorado con originales sombreros, adquiridos en diferentes lugares, junto a pinturas e ilustraciones. En sus laterales se han colocado unas mesas de noche recicladas en madera y terciopelo gris, color que se utiliza en los muebles de este espacio.