Los efectos del temporal, de la primera borrasca del otoño bautizada como Aline, siguen provocando desperfectos en Cádiz. Esta misma mañana, la caída de una cornisa ha obligado a cerrar el acceso principal al mercado de abastos de Cádiz, el situado frente al edificio de Correos. La Policía Local ha cerrado esa puerta y, además, ha acotado con vallas la zona afectada por el desprendimiento. El primer teniente de alcalde, José Manuel Cossi, se ha personado en el mercado para comprobar los daños y coordinar la adopción de medidas.

Ha sido poco antes de las doce de esta mañana cuando un trozo de la cornisa de esa entrada a la plaza de abastos se desprendió dejando numerosos cascotes en el suelo. Sucedió, de hecho, casi al tiempo en el que se ha producido en la capital gaditana una breve pero intensa tromba de agua acompañada de un fuerte viento.

La cornisa dañada en el mercado.

Agentes de la Policía Local han sido los encargados cerrar este acceso al mercado, desviando el tránsito de personas que querían entrar o salir de la plaza, y luego ha acotado ya en el interior del mercado la zona en la que se ha producido el desprendimiento, para evitar que nuevos cascotes pudieran alcanzar a las personas.

Fuentes municipales han señalado que efectivos de bomberos y técnicos municipales de Urbanismo han visitado el lugar para "comprobar que no hubiera otra zona con riesgo de caída".