En la ciudad hay multitud de entidades que dedican su labor, o buena parte de ella, a atender a los que solicitan su ayuda. Desde Cáritas hasta las asociaciones de vecinos, pasando por las cofradías y numerosas asociaciones como Caballeros Hospitalarios, Virgen de Valvanuz, Dora Reyes y un largo etcétera. Y esto provoca cierta controversia a la hora de repartir las ayudas.

Por eso, los representantes de Cáritas del casco antiguo plantean la creación de una especie de central de datos que sirva para controlar las ayudas. Un mecanismo que incluya a todas las entidades para conocer qué ayudas ha recibido o dónde es atendida cada persona. De esta forma, se entiende que se conseguiría un mejor reparto de los fondos disponibles para ayudar a los necesitados, evitando que una misma persona o familia acuda a varios centros recibiendo en cada uno de ellos ayudas a las que después no podrán acceder otras personas.

Por citar un ejemplo, si cuando alguien recurre a Cáritas los voluntarios pudieran consultar en una base de dato qué otras entidades ayudan a esa persona y cómo, el criterio sería más correcto. Y de esta forma, lo que hay disponible para las ayudas se podría administrar de forma más equitativa.

Cáritas comenta que actualmente sí hay algunos procedimientos mínimos para corroborar los datos que aportan aquellos que piden ayuda (como certificados de desempleo, libros de familia o documentos que acrediten que una persona vive en alquiler o posee una vivienda, para los casos en que se solicite el pago de recibos de luz, agua o comunidad, por ejemplo). Pero aún así, estos procedimientos se pueden mejorar, según entiende Cáritas.

Precisamente, el pasado jueves aprobaba el Ayuntamiento la incorporación al Consejo Municipal de Inclusión Social a todas las asociaciones vinculadas con la ayuda a los necesitados. Un consejo municipal que próximamente será constituido y que podría servir para encauzar esta medida que plantea Cáritas arciprestal de Cádiz interior.