Las obras que se efectúan en el castillo de San Sebastián, que se van a incrementar en el futuro cuando empiece la rehabilitación propiamente dicha, ha obligado a reforzar los dos puentes de acceso a la fortaleza en el paseo Fernando Quiñones.

Así, ante el peso que va a soportar estas estructuras en los próximos meses con el continuo paso de camiones y maquinaria, los operarios de Tragsa han puesto una serie de puntales en el arco del puente canal y el que se encuentra junto a la puerta del castillo para evitar que se pueda producir un hundimiento o un deterioro de estas dos estructuras.

Cabe recordar que el paseo Fernando Quiñones va a ser también reforzado en el futuro y la intención es crear una especie de plataforma que irá en altura para que se pueda ganar algo de espacio a lo ancho. Ayer era curioso ver todavía a algunos jóvenes lanzándose desde el puente canal con los puntales bajo la estructura.

De momento, lo que se ha procedido hasta ahora es a eliminar los edificios y estructuras en el interior del castillo que no eran originarios en su construcción. A partir de ahora se inicia la rehabilitación propiamente dicha y su adaptación a los nuevos usos que tendrá para la celebración del Bicentenario de la Constitución de 1812. Entre ellos estará la creación de dos auditorios y una zona de esparcimiento para los ciudadanos, a lo que hay que añadirle la rehabilitación del pantalán que servirá para realizar un transporte marítimo desde la playa de La Caleta hasta el propio castillo.

Precisamente para el día de hoy la alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez; el presidente del Consorcio para la conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812, Luis Pizarro, y la directora general de sostenibilidad de la Costa y del Mar del Ministerio de Medio Ambiente, Alicia Paz, firman el protocolo general de utilización del castillo de San Sebastián en la playa de la Caleta, durante un acto que se celebrará en el centro cultural municipal Reina Sofía, a las diez menos cuarto de la mañana.

Las obras de rehabilitación del citado castillo se prevén concluir en noviembre de 2011 para que el recinto entre en funcionamiento para 2012, contando para ello con una comisión técnica que será la encargada de realizar un seguimiento de los trabajos y de solucionar cualquier problema que pudiera surgir durante el desarrollo del proyecto.

El puente canal, que en las pleamares del verano se convierte en improvisado trampolín para la chavalería, fue construido en el año 1979 para permitir el movimiento de barcas cañoneras con motivo del asedio inglés a la ciudad.

Fue el general José Mazarredo el que planeó la construcción del puente para facilitar el paso de las citada barcas para hostigar a la flota inglesa al mando del almirante Nelson.

Los propios gaditanos tallaron en la piedra ostionera de La Caleta para evitar que las embarcaciones tuvieran que rodear los bajos del castillo de San Sebastián, convirtiéndose en una pieza fundamental para la defensa de la ciudad. Ahora lo siguen utilizando las embarcaciones de poco porte, para evitar también rodear el castillo.

Por otra parte, el castillo y la avanzada están unidos por otro puente, el de la arena, en tanto en el paseo se mantiene el de hierro, llamado así por el material que se empleó para su construcción, mientras que los tres situados a la entrada del citado permanecen cegados por la acumulación de arena, tanto por la playa de la Caleta como por el litoral.