La bici, de cero a doce

El uso de la bicicleta como medio de transporte, como paseo o como ejercicio, se va a incrementando día a día en la ciudad, como visualmente es evidente. A ello se le une desde hace unos meses el boom de los patinetes eléctricos, que en Cádiz ha tenido uno de los crecimientos más altos de todo el país.

La concejalía de Movilidad Urbana está elaborando un estudio en el que se analiza, en determinados puntos de la ciudad, el paso de vehículos, autobuses, camiones, motos, bicicletas, patinetes y peatones. Estos aforos se ubican en las zonas de mayor utilización de la trama urbana.

Uno de ellos es la zona de las bóvedas de San Roque, en la conexión entre Puerta Tierra y el casco antiguo, y los resultados que ha dado son muy significativos y dejan claro que se está produciendo una evolución en el uso de los medios de transportes. Lento, pero continuo.

El estudio se centra en la evolución de cada uno de los tráficos entre las siete de la mañana y las nueve de la noche, hora a hora.

Utilizando como ejemplo un único día, el pasado 12 de febrero, se constata un crecimiento espectacular del uso de la bicicleta, así como la irrupción con fuerza del patinete.

A la hora de hacer la obligada comparación con tiempos pasado, única forma de comprobar si se ha producido o no una evolución en los usos de los ciudadanos, se aprovecha el informe que el Ayuntamiento elaboró en 2013, durante la etapa de gobierno del Partido Popular, para la confección del Plan de Movilidad Urbana Sostenible, un documento muy avanzado pero que no llegó a ponerse en marcha.

El PMUS destacaba que, en el conjunto de la ciudad, el 52,68% de los ciudadanos eran peatones natos; el 28,7% utilizaban el vehículo privado y el 18,57% el transporte urbano, mientras que el 0,06% era habitual de la bicicleta.

La medición realizada en febrero pasado ofrece cambios muy significativos especialmente centrado en los vehículos menos contaminantes: la bicicleta y el patinete, aparato éste que en 2013 no estaba aún de moda.

La medición dispara el uso de la bicicleta hasta el 12,2%, mientras que el patinete llega hasta el 7,2%. Es decir, roza el 20%. Si unimos el porcentaje de peatones, que llega al 45% en este unto de análisis y el dato del autobús, sensiblemente bajo para la zona elegida para la medición, el transporte saludable se acerca al 70%, un dato excepcionalmente elevado.

Con todo, es más que significativo el empuje de la bicicleta. El 12 de febrero, por este punto, pasaron 1.150 unidades. La mayor densidad de paso se produjo entre las ocho menos cuarto y ocho de la mañana, con 46 ciclistas, y entre las dos y veinte y dos y media, con otros 42. El patinete eléctrico parece tener un claro carácter laboral porque en el bloque de la mañana se concentra especialmente entre las siete y las nueve de la mañana, para volver a incrementar su uso entre las dos y las tres de la tarde.

Igualmente destacable la fortaleza de la motocicleta como medio de transporte, pues se cuantificaron 966.

En cuanto a los coches, donde se incluye también el servicio público del taxi, alcanza el 24% del total, manteniendo la tendencia a la baja ya detectada en cuanto a la conexión con el casco antiguo que, en todo caso, tiene pendiente el refuerzo del transporte urbano.