Wyoming vuelve con Los Insolventes a la Supersonic

La penúltima aventura musical del Gran Wyoming (José Miguel Monzón) nació en un garito madrileño a partir de la improvisación y el azar. El showman incorrecto por antonomasia estaba escuchando a La Última Experiencia y se acercó a los camerinos para felicitarles por su actuación y su buen gusto (hacen rock y blues), a lo que éstos le correspondieron invitándole a que se subiese con ellos al escenario a tocar.

Desde entonces, el Gran Wyoming y Los Insolventes (pseudónimo de La Última Experiencia cuando acompañan al presentador) se han convertido en un matrimonio estable que cada dos semanas se sube a una furgoneta para ofrecer conciertos en salas de todo el país.

La filosofía de la banda es bien sencilla: no pretenden ofrecer nada que no exista desde que a Keith Richards le dio por hacer riffs. De lo que se trata, según palabras del propio Wyoming, es de hacer bailar al personal, de pasar un buen rato y de dedicarse a hacer cada cierto tiempo lo que realmente le gusta: cantar y tocar (a la guitarra) Rock and Roll.

Así, a lo largo de esta noche, la formación interpretará versiones de Chuck Berry o Lee Hazlewood (responsable de la celebérrima This Boots Are Made For Walking, para los menos duchos en el asunto), dejando entre tema y tema el espacio necesario para que el humorista intercale ocurrencias de diverso calado.

No sabemos cómo afectará al desarrollo del concierto el catastrófico hecho (para los que nos gustan tanto el Gran Wyoming como Bigott) de que éste coincida con el momento álgido del Mirador Pop, que se estará celebrando a trescientos metros de la sala Supersonic; pero de lo que sí estamos seguros es de que los que opten por la aventura insolvente del gran showman madrileño no saldrán defraudados.